Vitoria. Las tablas hacen doblete en la jornada de hoy. A la misma hora (20.30), el Teatro Principal y el centro cívico Hegoalde se reparten dos ofertas donde imagen, música y baile se reparten el protagonismo. En la calle San Prudencio, las protagonistas -con todo vendido- serán las voces del Alabama Gospel Choir. En Judimendi, serán los breakers de Circle of Trust los que reclamen la atención del público.

Entre el abanico de su repertorio -desde el Barroco hasta el siglo XX-, el coro estadounidense, con más de un siglo de tradición, destaca especialmente por su visita a los espirituales negros, a la visceral manera de entender la melodía que legó el sufrimiento de la esclavitud.

Con la cantante Francine Murphy como principal estandarte, los más de veinte cantantes acercarán hasta un Principal abarrotado la receta histórica que les ha llevado, entre otros escenarios, al Carnegie Hall o a la Casa Blanca, girando además por las tablas de medio mundo.

Los que giran por las tablas... con la cabeza son los miembros del colectivo zaragozano Circle of Trust. Hace unos años, tras un festival Break on Stage, los responsables de Logela Multimedia, empresa afincada en Elorrio, se acercaron hasta ellos. Y todo surgió.

Surgió un primer espectáculo, Clock, y ahora ha surgido este Papiro... flexia, que recala esta noche en el Jesús Ibáñez de Matauco. A través de sketches y secuencias, los bailarines -Ader, Phase, Put_One, Marcos, Vento y Extremo- se fundirán con los audiovisuales aportados por Logela Multimedia en un espectáculo multidisciplinar.

Trucos visuales con imágenes pregrabadas ofrecerán diversas sensaciones en escena, siempre con el arte de crear formas con el papel como leit motiv de la pieza. "Recuerda ese momento en el que cualquier artista que empieza se enfrenta a la hoja en blanco, al pentagrama...", explica Carlos Gómez, de Logela Multimedia.

Elefantes, pájaros, ranas, aviones... Las más diversas formas se suceden en escena a lo largo de la hora de espectáculo, con un mágico juego de sincronías en el que los breakers acaban por interactuar con las propias imágenes que sirven de escenografía. "Desde hace tiempo teníamos ganas de trabajar con una compañía de danza; Circle of Trust eran una buena opción, parecida a lo que hacemos".

Los juegos ópticos y la propia magia de los intérpretes -una de las mejores agrupaciones estatales del género- completan un trabajo dinámico y repleto de ritmo, tan visceral como ese gospel que se repartirá con los breakers la platea de hoy.