Olvídate de las arrugas: rejuvenece tu piel con estos trucos naturales

A partir de una edad, la piel no deja de perder facultades: menos firmeza, deshidratación, arrugas por doquier, etc. En gran parte, esto se debe a la disminución del colágeno, un componente importante que mantiene el cuerpo elástico. Por lo tanto, y al juntarse con otros factores, el envejecimiento va a más y más.

Pero no hay nada que temer, pues existen métodos para que el cutis recupere sus propiedades y lucir más joven sin gastar mucho dinero. Todo ello con trucos naturales que debemos tener en cuenta.

Recursos naturales para rejuvenecer la piel

Después de comprender por qué surge el envejecimiento de la piel y cómo podemos evitarlo en la medida de lo posible, vamos a repasar una serie de técnicas que son de mucha ayuda para lograr nuestro objetivo. 

Exfoliación e hidratación

Con los años, la regeneración celular es mucho más lenta, por lo que da un aspecto envejecido. Este efecto se puede solucionar a través de la exfoliación, algo clave en rutinas de belleza. Con este método, eliminamos las células muertas y renovamos toda la piel. 

La hidratación es otro aspecto fundamental para que la piel luzca luminosa y flexible. La vitamina C es un buen aliado para esto, porque produce colágeno y contribuye a fortalecer el tono del cutis, dándole brillo. Se sugiere incluirla en una dieta equilibrada y en sérums diarios. 

Protección solar y cuidado nocturno

Como el sol provoca la aparición de manchas y arrugas en la piel, la protección solar cobra más importancia que nunca. Por este motivo, si aplicamos cremas con factor de protección solar, obtendremos resultados inmediatos ante el peligro de la radiación ultravioleta. 

En las noches, debemos hidratar la piel con cremas que recuperen de forma eficaz la barrera cutánea y así eviten la pérdida de agua. Asimismo, se aconseja aplicar una mascarilla semanal con ingredientes que aporten elasticidad y firmeza a la piel. 

Masajes y ejercicios tonificantes 

Otro recurso útil para prevenir el envejecimiento es tonificar la musculatura a través de masajes y ejercicios tonificadores. Con masajes realizados con rodillos, por ejemplo, hacemos que la piel absorba rápidamente los productos cosméticos y que la sangre circule mejor. 

También existen ejercicios que fortalecen la estructura facial, como presionar las cejas y pómulos a la vez que se cierran y abren los ojos. También se puede hacer lo propio con las mejillas, sonreír y mantener la posición por diez segundos, repitiendo el proceso cinco veces.

El cuello y el escote

Los cuidados de la piel van más allá de la cara. El cuello y el escote son zonas que evidencian señales de envejecimiento y exigen atención y cuidado, pues son muy vulnerables por la pérdida de elasticidad. 

Para ello, debemos escoger productos y métodos que sean hidratantes y reafirmantes, al igual que aplicar masajes ascendentes para estimular la circulación sanguínea. De este modo, lucir una apariencia más juvenil y afrontemos con garantías el paso del tiempo. 

Cuestión de actitud

Muchas personas tienden a despreocuparse en lo que al cuidado de la piel respecta, y más cuando pasan los años. En estos casos, depende de cada uno el mantener la piel elástica y tersa, recurriendo a remedios naturales y tomando conciencia de ello, o asumir el paso del tiempo y envejecer con rapidez. Todo es una simple cuestión de actitud.