La estrella ofensiva del Baskonia, Markus Howard, se mostró ambicioso en su comparecencia ante los medios de esta mañana previa al vital encuentro del viernes contra la Virtus Bolonia. "Tener la oportunidad de alcanzar el play off con el Baskonia es un honor tremendo, así que tenemos que pelear cada uno de los siguientes partidos para posicionarnos lo mejor posible. Cada encuentro de ahora en adelante es de victoria obligada porque queremos llegar lejos", afirmó.
El escolta norteamericano espera "un partido difícil ante un equipo que juega muy duro". "Nos ganaron en el encuentro de ida, así que tenemos que sacar lecciones de ello. En cualquier caso, si seguimos luchando y jugando con energía todo termina llegando. Eso y tener un buen inicio de partido será clave", adelantó.
Lo que no debe repetirse bajo ningún concepto es lo sucedido el domingo ante el Valencia Basket, donde el Baskonia cedió 28 puntos al descanso.
"Hay que dar crédito al Valencia. Venían de perder de 30 contra el Asvel y lo raro habría sido que no lo hubieran dado todo. Obviamente nosotros teníamos que haber dado nuestra mejor versión y no lo hicimos durante los tres primeros cuartos. Hay algunas cosas que deberíamos haber hecho para llevarnos la victoria y ahora estamos analizando qué es lo que se podría haber hecho de otra manera", dijo.
"No estoy necesariamente tan cómodo como creo que podría en cuanto al manejo de los partidos, pero eso también es lo bonito del baloncesto, siempre se puede mejorar"
En su opinión, los comienzos de los encuentros "llevan siendo un problema toda la temporada" y es algo que el equipo debe corregir. "No podemos permitir que los arranques de los partidos nos condicionen tanto. Hay veces en las que hemos remontado, pero no podemos estar así siempre, queremos ser un equipo conocido por golpear primero, no por los malos comienzos", argumentó.
Momento dulce
En ataque, Howard será sin duda uno de los factores decisivos. Cuando está entonado, el equipo lo nota y todo es más fácil, aunque él no siente especial responsabilidad por ello: "No es una presión añadida, simplemente intento salir y hacerlo lo mejor que puedo en función de lo que necesite el equipo y mis habilidades".
En algunos momentos, como sucedió en Valencia durante el intento de remontada en el que el Baskonia se encomendó a su talento, todo el peso del ataque ha recaído sobre él, pero Howard está cómodo con ese rol.
"No me siento solo, tenemos un gran grupo de jugadores muy talentosos. Yo simplemente aporto mi juego y hay algunos partidos en los que es necesario que anote mucho y me ajusto a ello, pero no siento que toda la responsabilidad recaiga sobre mí", aseguró.
Sus excepcionales números, con los que lidera tanto la ACB como la Euroliga en anotación, hablan de su fantástica temporada, aunque él aclara que las estadísticas no son importantes para él: "Yo juego para ganar. Formo parte de una organización con mucha historia, por la que han pasado grandes jugadores, así que mi principal preocupación es conseguir victorias".
"Sólo estoy centrado en mi tarea actual, que es el partido del viernes contra la Virtus Bolonia; soy un afortunado por estar aquí, me encanta; la organización nos ha tratado a mí y a mi familia fantásticamente"
Margen de mejora
De hecho, pese a sus extraterrestres actuaciones recientes, con más de 35 puntos anotados ante el Real Madrid, el Barcelona, el Granada y el Valencia Basket, opina que aún tiene margen de mejora: "No estoy necesariamente tan cómodo como creo que podría en cuanto al manejo de los partidos, pero eso también es lo bonito del baloncesto, siempre se puede mejorar. Me tomo cada minuto que estoy en la cancha jugando o entrenando como una oportunidad para ser mejor jugador, no quiero ser conformista".
En ese sentido, una de sus principales preocupaciones en los últimos tiempos ha sido cómo hacer frente a los agresivos marcajes que plantean sus rivales tanto en la ACB como en la Euroliga, cada vez más centrados en anular al referente anotador azulgrana.
"Hacia el final de la pasada temporada empecé a ver cambios en las defensas rivales y esa experiencia me ayudó a prepararme para esta campaña. En cualquier caso, cada partido y rival es diferente. Aunque se repitan algunas tácticas y esquemas, el duelo individual cambia porque el defensor es distinto. Intento aprender de cada partido y ver muchos vídeos para hacer frente a esas defensas, está siendo un buen proceso de crecimiento", detalló el de Nueva Jersey.
Seguro que el viernes ante la Virtus se encontrará una defensa igualmente pegajosa, así como un ambiente hostil en las gradas. Sin embargo, eso no preocupa a Howard que no siente "una presión diferente por jugar en casa o fuera": "Llevo muchos años jugando a esto y te acostumbras a estos ambientes. Para nosotros no hay partido que nos quede grande, los tratamos todos por igual".
"Tener la oportunidad de alcanzar el play off con el Baskonia es un honor tremendo, así que tenemos que pelear cada uno de los siguientes partidos para posicionarnos lo mejor posible"
Planes de futuro
Es evidente que la excelente temporada de Howard no está pasando desapercibida para los grandes equipos de Europa, por lo que su continuidad en Vitoria no está asegurada pese a su renovación hasta 2026. Sin embargo, de momento prefiere no pensar en su futuro.
"Sólo estoy centrado en mi tarea actual, que es el partido del viernes contra la Virtus Bolonia. Soy un afortunado por estar aquí, me encanta. La organización nos ha tratado a mí y a mi familia fantásticamente. Mi principal preocupación es tener una postemporada lo más larga posible, tenemos las piezas correctas para conseguirlo y todo depende de nuestra ejecución", sentenció.