El Baskonia ya tantea al sustituto de Fontecchio

El hueco dejado tras la dolorosa marcha de Simone Fontecchio a la NBA parece que no tardará mucho tiempo en ser cubierto. El Baskonia, siempre atento al mercado, ya tenía en su agenda una nómina de posibles recambios en el caso de que el italiano acabase dando el salto a la mejor liga del mundo como así ha sido. De hecho, ya se ha puesto manos a la obra para cerrar al jugador que llene el vacío del exterior de Pescara tras su marcha a los Utah Jazz.

El elegido por la entidad de Zurbano no es otro que el lituano Ignas Brazdeikis. Se trata de un jugador lituano de 23 años, 1.99 metros y 100 kilos nacido en Kaunas el 8 de enero de 1999, pero que ya de niño emigró con su familia a Estados Unidos. La familia emigraría poco después Canadá, donde se asentaría y de hecho, el jugador por el que está pujando el Baskonia tiene pasaporte canadiense. En Ontario el pequeño Brazdeikis se enamoró del baloncesto, lo que lo llevó a entrenar en la Universidad de Michigan, justo al sur de la frontera. Jugó una temporada en la NCAA antes de ser seleccionado en el draft de 2019, y pasó los últimos tres años entre la NBA y la G-League.

Esta temporada ha militado en los Orlando Magic, con los que ha jugado 43 partidos en los que ha permanecido una media de 12 minutos en cancha, tiempo que le ha permitido presentar una discreta estadística de 4,9 puntos, 1,9 rebotes y una valoración de 4,6 puntos. Su porcentaje en tiros de campo se quedó en un 41,6% y en triples en un 31,5% y un 68,6% en tiros libres.

Pese a no haber jugado mucho con los Magic, el jugador despertó el interés azulgrana. Eso sí, en las oficinas del Buesa Arena tendrán que lidiar con que el jugador quiere ampliar su carrera de tres temporadas en los Estados Unidos, y que el Zalgiris Kaunas también pretende su fichaje. Otra vez de nuevo se entromete el conjunto de Kaunas. Habrá que esperar. Eso sí, fuentes cercanas al alero desvelaron el interés del Baskonia por hacerse con sus servicios. El exterior báltico participó con Lituania durante los partidos internacionales de principios de julio y ahí coincidió con dos de los que serían sus compañeros en el conjunto gasteiztarra, Tadas Sedekerskis y Rokas Giedraitis. Un tridente lituano en esos momentos parecía insospechado, pero una pequeña posibilidad ya se barruntaba.

Eso sí, en esos momentos la posición de alero ya estaba bien cubierta en el conjunto azulgrana al estar en nómina el propio Giedraitis y Fontecchio. Semanas después el puesto estaba aún más completo ya que se podría incluir al recién llegado Hommes, quien en ocasiones podría actuar de 'tres'.

Sin embargo, la situación ha variado tras la irrupción de la franquicia de Salt Lake City para hacerse con los servicios de la joya de la corona baskonista: Simone Fontecchio. La salida de este último obligaba al club a mover ficha. Hace días sonó el nombre del polaco Mateusz Ponitka. No era el elegido. El club buscaba otro perfil distinto al exterior del Zenit de San Petersburgo. La entrada en las arcas de un millón de euros tras pagar Fontecchio su cláusula de salida para poder fichar por los Jazz de la NBA permitía al Baskonia apuntar más alto en sus objetivos para el puesto de alero.

Conscientes de que reemplazar a un jugador de la talla de Fontecchio iba a ser complicado por su carácter, influencia en el juego y carisma, el Baskonia prefería esperar un poco para dar con la pieza ideal que reuniese buena parte de las virtudes del jugador italiano y ese no es otro que Brazdeikis. Un todoterreno con mucho carácter, algo del agrado de la dirección deportiva del club y también de la afición del Buesa Arena, ansiosa de ver guerreros entregados por la causa. Brazdeikis lo es.

Buena prueba de ello es lo sucedido durante su debut con la selección de Lituania durante las últimas ventanas FIBA. El jugador fue clave en el triunfo báltico ante el combinado de Bulgaria por 72-70. De salvador fue calificado por las crónicas deportivas en su país. El jugador nacido en Kaunas hace 23 años (8 de enero de 1999) dejó su huella en la victoria ante el combinado búlgaro.

Brazdeikis anotó 13 puntos con 5/15 en tiros de campo, 6 rebotes, 2 asistencias y 1 robo durante los 23 minutos, que estuvo en la pista. Sin embargo, más que sus puntos y rebotes, en Lituania destacaron la sangre fría del jugador para echarse al equipo a la espalda en los momentos calientes. Así lo señaló Kazys Maksvytis, seleccionador lituano, tras la victoria.

“Realmente no convirtió sus tiros, pero se mantuvo en el juego y jugó bien en defensa. Lo más importante es que luchó hasta el final. Es un jugador en el que podemos confiar en los momentos críticos”. No se quedaron ahí las alabanzas hacia el jugador pretendido por el Baskonia. “Es uno de los jugadores más talentosos del equipo. Le gusta jugar con el físico. Ignas jugó duro, manejó muy bien el contacto y tuvimos situaciones ventajosas con él", añadió al respecto.

De hecho, fue un mate de Brazdeikis el que le dio a Lituania una ventaja de dos puntos, 71-69, con poco más de un minuto por jugar. Bulgaria tuvo la oportunidad de empatar, pero una vez más fue el alero de los Orlando Magic quien hizo el trabajo para Lituania, capturando un rebote rebote clave cuando Stanimir Marinov falló una bandeja que podría dar la victoria a su rival. Luchador y con entrega. Un ganador nato, que nunca se rinde. Así lo proclama el propio jugador. “Solo quiero ganar. Quiero ganar todos los partidos que pueda. Ese es el objetivo, eso es lo que todos queremos hacer”, dijo Brazdeikis.

Es de los que siempre se levantan cuando se caen. Carácter, que es lo que busca el Baskonia. Lo ha encontrado en Brazdeikis. “No siempre vas a jugar bien. Solo tienes que mantener tu confianza y creer en lo que puedes hacer. Mis compañeros creyeron en mí, el entrenador creyó en mí. Eso es todo lo que necesito", apuntó en su día.