- El TD Systems Baskonia quiere prolongar en este arranque de 2021 la notable racha victoriosa con la que clausuró el 2020 tras las alegrías registradas ante el Armani Milan, el Iberostar Tenerife, el Zaragoza y el Valencia Basket. El equipo vitoriano abre esta tarde el nuevo año ante un viejo conocido como Ibon Navarro, al frente de un Andorra que aterriza en el Buesa Arena con sensibles bajas en su engranaje (Tyson Pérez y Moussa Diagne) pero recupera a Malik Dime y dispondrá de un refuerzo de última hora para compensar tanto sobresalto bajo los aros como Artsiom Parakhouski.

El partido es sumamente importante para los intereses azulgranas. A falta de dos jornadas para que se efectúe la criba definitiva de aspirantes para tomar parte en la Copa del Rey prevista en el WiZink Center del 14 al 17 de febrero, el conjunto de Ivanovic puede asegurar esta jornada de forma matemática la cuarta plaza. Ello le permitiría certificar la vitola de cabeza de serie de cara al sorteo y evitar entre los posibles rivales para el primer enfrentamiento de cuartos al Real Madrid, Barcelona e Iberostar Tenerife.

Para que se haga realidad este doble objetivo, se necesitan dos combinaciones: la victoria del Baskonia y la derrota del San Pablo Burgos en el Coliseum ante el Unicaja. En caso de derrota azulgrana y un triunfo de los pupilos dirigidos por Joan Peñarroya, el TD Systems ya no dependería de sí mismo en la última jornada para concretar la cuarta plaza. Y es que actualmente tiene respecto a su rival directo un balance sensiblemente inferior (-28) en el coeficiente entre puntos a favor y en contra.

En cualquier caso, la formación alavesa es consciente de que ganando hoy y la próxima semana en el Martín Carpena a un Unicaja sumergido en una grave crisis de identidad no deberá prestar atención a otros resultados y será cabeza de serie en el sorteo copero. La visita del Andorra, cuyas esperanzas de disputar el torneo del K.O. se han evaporado ya casi del todo en una campaña donde le ha mirado el tuerto con la plaga de lesiones, constituye el preludio de una posterior semana muy exigente con, de nuevo, una doble jornada en la Euroliga.

El Baskonia se pondrá al día el martes 5 en la máxima competición con el choque que tiene pendiente en Berlín. 48 horas más tarde, en concreto el jueves 7, recibirá en el Buesa Arena al todopoderoso CSKA de Dimitris Itoudis, imbatido desde el pasado 22 de octubre y con doce triunfos consecutivos como amenazadora tarjeta de presentación.

Ibon Navarro deberá hilar muy fino en la pizarra si aspira a que el conjunto del Principado dé la sorpresa en el Buesa Arena. El Andorra no aterriza en Vitoria en las mejores condiciones físicas para protagonizar alguna heroicidad, aunque siempre es un visitante que le ocasiona problemas al TD Systems.

El oponente azulgrana atesora un peligroso juego exterior donde Clevin Hannah y Jeremy Senglin llevan la voz cantante. Tres exbaskonistas como Sergi García, Jelinek y Palsson disponen de un rol algo más secundario en la cuerda exterior, mientras que el preparador vitoriano se nutre por dentro de tipos con mucho oficio como Nacho Llovet, Bandja Sy y Babatunde Olumuyiwa.

Está por ver si Parakhouski, su flamante refuerzo que ya se enfrentó en su día al Baskonia en la Euroliga durante su etapa en el Nizhny Novgorod ruso, ha dispuesto de tiempo para familiarizarse con los sistemas y tiene sus primeros minutos. "Debemos darle tiempo. Nos dará presencia física en la pintura y anotación cerca del aro. Posee mucha calidad, pero es cierto que en los dos últimos años no ha jugado a su mejor nivel. Para nosotros es una buena oportunidad y también para él", aseguró ayer Ibon Navarro cuestionado por el posible debut del fornido bielorruso en tierras alavesas.

El conjunto del Principado recupera a Malik Dime y ha reclutado esta semana a Parakhouski para minimizar sus bajas en el juego interior