- El Estrella Roja abrió el pasado jueves la veda de las destituciones de técnicos en la Euroliga al prescindir de los servicios del técnico serbio Sasa Obradovic, que deja su hueco en el banquillo de los de Belgrado a Dejan Radonjic. Los malos resultados cosechados por el conjunto serbio hasta el momento en el torneo continental, en el que actualmente ocupa la penúltima posición con un pobre balance de cinco victorias y once derrotas, ha forzado al club a tomar la decisión de cesar a Obradovic, que perdió seis de sus últimos siete encuentros en la competición.
El hombre llamado a revertir la situación es un viejo conocido de la entidad. Después de su paso de dos temporadas por el Bayern de Munich, el Estrella Roja recupera al que fuera su entrenador entre los años 2013 y 2017. En una maniobra similar a la efectuada por el Baskonia la pasada campaña con la contratación de Dusko Ivanovic cuando el equipo pasaba por un mal momento, el club serbio espera que Radonjic sea la solución a sus males y ayude a cambiar su dinámica.
La destitución de Obradovic ha sido la primera de la presente Euroliga, pero seguramente no sea la última. De hecho, Rimas Kurtinaitis, actual entrenador del Khimki, está en la cuerda floja y no sería una sorpresa que el club ruso decidiera separar su camino del lituano. El Khimki, después de una potente inversión para traer grandes nombres a la plantilla como Jonas Jerebko, Greg Monroe y Jordan Mickey, solo ha conseguido dos victorias en lo que va de Euroliga y ocupa la última posición de la tabla, a siete victorias de los puestos de Play Off, el objetivo prioritario del equipo. Si siguen encadenando derrotas, los días de Kurtinaitis en la entidad de la que forma parte desde 2019 están contados.
