- La etapa de tres años de Jayson Granger en el TD Systems Baskonia tocó ayer oficialmente a su fin con el anuncio de su salida por parte del club. Tres temporadas en las que el base uruguayo se ha visto tremendamente lastrado por las lesiones y en las que solo ha podido disputar 98 encuentros oficiales. Eso sí, dentro de una campaña especialmente dolorosa en la que se lesionó de extrema gravedad en el primer minuto, al menos el director de juego pudo despedirse del Baskonia sobre el parqué en la fase final de la Liga ACB. Y por todo lo alto además, con el título de campeón en la mochila que sirve para olvidar todo el sufrimiento padecido en una etapa que en lo personal él mismo ha reconocido que no ha cumplido con las expectativas.

"Sinceramente no sé por dónde empezar ni qué decir... Se cierra una etapa de tres temporadas en un sitio donde me ha tocado vivir de todo, lo bueno y lo malo de este hermoso deporte. Llegué en 2017 con ganas de comerme el mundo y darle a este club mi mejor versión; por desgracia, no he podido estar al nivel que se esperaba. Aun así, intenté dar lo mejor de mí hasta poner mi salud al límite para tratar de estar siempre y poder corresponder a tanto cariño recibido. No me gustan nada las despedidas, pero todo ciclo llega a su fin y es lo que toca ahora. Simplemente, gracias a toda la ciudad de Vitoria, a toda la afición baskonista, a todos aquellos que trabajan en la sombra para que este club sea importante (vosotros ya sabéis quienes sois). Ahora arranca una etapa nueva en mi vida donde me toca volver a disfrutar de este deporte. Siempre os llevaré conmigo ¡Hasta pronto!", se despidió el uruguayo a través de sus redes sociales.

A pesar de haberse recuperado ya de su grave lesión del principio de la temporada, las dudas han afectado seriamente al futuro profesional de Granger con claridad. No en vano, le ha costado encontrar nuevo acomodo y finalmente consigue mantenerse en la Euroliga con el contrato de un año que va a suscribir con el Alba de Berlín. En esta experiencia en Alemania, el base uruguayo, que estará a las órdenes de Aíto García Reneses, pretende recuperar su mejor nivel para relanzar de nuevo su carrera dentro de un año.