Tras una larga semana sin esfuerzos competitivos aprovechada a partes iguales para levantar el pie del acelerador en el plano físico y mejorar los automatismos colectivos, el Baskonia regresa hoy a la acción con un choque en la cumbre ante el vigente monarca europeo. Difícilmente existe hoy en día otro adversario más atractivo y opulento que el visitante de esta noche en el Buesa Arena. Un Fenerbahce ya sin Bogdan Bogdanovic ni Ekpe Udoh pero plagado de jugadores deslumbrantes dirigidos por el mejor técnico europeo constituirá un desafío mayúsculo para un equipo vitoriano en franca progresión y que pretende sumar su cuarta victoria consecutiva en la Euroliga con el fin de atacar definitivamente la glamourosa zona del Top 8.

La velada amanece con el problema añadido de la incógnita sobre el estado físico de Janis Timma, al que una sobrecarga en la rodilla le impide estar en plenitud de condiciones. La hipotética ausencia del letón, sumada a la de Patricio Garino, dejaría huérfana la posición de alero ante un rival sobrado de recursos e imprevisible por los diferentes quintetos que puede poner en liza a lo largo de los cuarenta minutos..

Con el aliento de más de 11.000 fieles, la cancha de Zurbano debe vestir sus mejores galas para tratar de engullir a uno de los favoritos al trono continental. El Fenerbahce cuenta con uno de los presupuestos más elevados de la competición -por encima de los 30 millones de euros gracias al patrocinio del Grupo Dogus- y comparece con todas sus estrellas, a excepción del lesionado Nikola Kalinic. Si bien es un oponente que se le da especialmente bien al Baskonia como local y que acumula casi tres lustros sin una alegría en Vitoria, se trata de la prueba del algodón definitiva para calibrar las restablecidas constantes vitales azulgranas.

Cuando se cumple esta jornada una tercera parte del trayecto a través de la maratoniana fase regular de la Euroliga, los favoritos han empezado a tomar posiciones. Apenas hay conjuntos descartados en la pelea, si bien el Estrella Roja, el Anadolu Efes o el Olimpia Milan sufren dificultades para seguir el ritmo del resto. Tras un comienzo aterrador que hizo temer lo peor, el Baskonia ha sabido reconducir el rumbo y ya se encuentra en condiciones de meterse entre los ocho primeros, el objetivo mínimo que se ha propuesto el club de cara a esta nueva andadura continental.

posible debut de jones A su favor juega el hecho de que tan solo ha disputado en el Buesa Arena seis de las nueve jornadas. De la fortaleza que exhiba al amparo de su público en los complejos siguientes compromisos (Fenerbahce, Unicaja, Barcelona y CSKA), dependerá en buena medida que escale posiciones en la tabla y se convierta en una alternativa al selecto elenco de favoritos. Mientras los vitorianos han dispuesto de varios días para recargar las pilas y preparar el choque, el Fenerbahce viene de disputar hace 48 horas un plácido encuentro correspondiente a su liga doméstica en el que el viejo zorro Obradovic concedió varios descansos y dosificó a sus primeros espada.

El partido puede suponer el estreno con la elástica baskonista del recién llegado Kevin Jones, predestinado a conceder minutos de descanso a Toko Shengelia y brindar consistencia a un juego interior privado durante las próximas semanas de Ilimane Diop. Cualquier ayuda será primordial para reducir a un Fenerbahce dotado de un poderoso fondo de armario. El rival azulgrana es un auténtico muro de hormigón y sus inmaculados números defensivos así lo acreditan.

La férrea disciplina implantada por Obradovic se refleja en que los turcos exhiben la defensa más granítica de la Euroliga. Con poco más de 70 puntos en contra por comparecencia, el hombre de las nueve Euroligas ha tejido una perfecta tela de araña que los grandes anotadores de Pedro Martínez (Granger, Beaubois, Janning, Shengelia...) están dispuestos a hacer trizas gracias a su pletórico estado de forma.

Pese a algún lógico titubeo en este arranque de temporada, el Fenerbahce ya exhibe sus afiladas garras. Todos conocen que acostumbra a ir de menos a más en el transcurso de las temporadas. También vienen de obtener sendas victorias ante los rusos del CSKA y del Khimki, lo que les ha permitido encaramarse a la tercera posición de la clasificación.

Todo lo que no sea hoy una velada al filo de la navaja constituirá una sorpresa, si bien aún permanece en la retina de los aficionados la aplastante exhibición alavesa de la pasada temporada ante el que, meses más tarde, se erigiría en el nuevo monarca del Viejo Continente. Tras una actuación para enmarcar, el Baskonia se impuso por 34 puntos de diferencia (86-52) propulsado por un baloncesto de muchos quilates. Cualquiera firmaría hoy una victoria más modesta.