BARCELONA Satoransky (10), Navarro (14), Perperoglou (7), Doellman (7), Samuels (11) --cinco inicial--; Ribas (13), Lawal (5), Abrines (12), Vezenkov (2), Oleson (5), Tomic (6).
ZALGIRIS Vecvagars (3), Seibutis (19), Ulanovas (17), Jankunas (11), Vougioukas (14) --cinco inicial--; Vene (-), Lekavicius (16), Pocius (2), Motum (-), Sajus (4), Hanlan.
Parciales 16-19, 22-12, 27-24 y 27-31.
Árbitros Belosevic (SER), Pastusiak (POL) y Mantyla (FIN). Eliminaron a Tomic en el Barcelona y a Lekavicius y Seibutis en el Zalgiris.
Pabellón Palau Blaugrana, 6.286 espectadores.
barcelona - El Barcelona doblegó al Zalgiris y coge un aire más que necesario antes del parón y de enfrentarse a una segunda vuelta clave en su camino al Top 8. El encuentro ante el colista era clave para no ver peligrar sus aspiraciones y recuperar ánimos después de dos derrotas consecutivas.
De hecho, el mal inicio de partido de los de Xavi Pascual pudo ser fruto de la presión que tenían encima. La derrota ante el Brose Baskets Bamberg de la pasada jornada dejaba al equipo blaugrana en una situación delicada que con este parche queda un poco paliada. Pero aún así les costó arrancar a los catalanes, que cedieron el primer cuarto (16-19) y tuvieron que ir a remolque antes de empezar a respirar.
El acierto lituano y los constantes arreglos de Jasikevicius en el banquillo fueron claves junto al nerviosismo local para que el Zalgiris tomara esa pronta ventaja, que llegó a ser de 8 puntos. De inicio, tan solo Samuels era el foco del trabajo ofensivo, mientras que al final del partido se vio a un Barça coral y colectivo que puso la puntilla al rival y al partido.
No fue para nada un partido similar al de la Fase Regular de esta misma temporada cuando el Barça perdió (88-92) en el Palau Blaugrana y dejó escapar la oportunidad de seguir siendo líder del grupo. El Barça cambió a tiempo para seguir vivo en este Top 16 al que Zalgiris ha dicho prácticamente adiós.
El Barça dejó atrás los nervios y esa presión y poco a poco encontró su ritmo, su camino al triunfo. Estuvo mejor en el tiro, hasta siete jugadores anotaron desde el triple. Lawal estuvo muy bien en el juego interior tapando el de nuevo gris partido de Tomic y todos los jugadores tuvieron su momento. Quizá corto e intenso, pero uno tras otro fueron martilleando el aro lituano.
Así, al descanso ya se llegó con 38-31 y, pese a que el Zalgiris intentó reaccionar tras el descanso y empezar igual que el primer cuarto, se quedó todo en el 38-35. La remontada quedó ahí y, pese a que Jasikevicius no dejó a los suyos irse del partido en ningún momento, la verdad es que cada minuto que pasaba el duelo pintaba más de blaugrana. - Europa Press