Vitoria. Decepcionado por la gestión de los últimos minutos, Zan Tabak tuvo que rumiar una dolorosa derrota que deja al Laboral Kutxa sin margen de error en la presente Liga ACB. El técnico croata lamentó la excelente ocasión que se marchó al limbo. "Estas cosas suelen pasar. Hay partidos como el del otro día en el que ganamos sin merecerlo y esta vez ha sido al contrario. Merecimos ganar, tuvimos el partido bajo control en el último cuarto con nueve puntos de diferencia, pero no lo acabamos. Pocos detalles decidieron el encuentro, pero está claro que necesitamos resolver mucho mejor los instantes decisivos", lamentó.
El técnico croata explicó que el cambio de Heurtel a falta de tres minutos, con 60-64 en el marcador, obedeció al cansancio del timonel galo, que fue relevado por un Cook muy desacertado al frente de la dirección. "Thomas me ha pedido el cambio porque no podía más. Es una cosa que los jugadores deben hacer. Estoy pidiendo a los jugadores que vayan a tope y, cuando no puedan más, haremos cambios", subrayó el croata que no quiso hacer sangre ni con la actuación del base neoyorquino nacionalizado montenegrino ni tampoco del francés evitando culpar a alguien en concreto del desaguisado acaecido en el CID. "Aquí ganamos y perdemos todos. Thomas ganó el otro día el partido. Todos, incluido yo mismo, pudimos tomar mejores decisiones en los últimos minutos. Ahora, vamos a intentar jugar con intensidad en casa para llevarnos la serie", reconoció el de Split.
La resolución de la serie tendrá lugar este martes en el Fernando Buesa Arena en un encuentro donde toda la presión recaerá en el Baskonia, que no puede permitirse el lujo de fallar al amparo de su afición y truncar su racha de nueve presencias consecutivas en la antesala de la final liguera. "Ya no se puede fallar. Estamos obligados a ganar porque no habrá más oportunidades", precisó Tabak, para quien su equipo "se resintió" con las prematuras eliminaciones de Lampe y Pleiss por faltas.
Pedro Martínez representó la otra cara de la moneda. Tras el mal trago que supuso la derrota en el asalto inaugural, el barcelonés dejó entrever que el triunfo insular hizo justicia con los méritos de sus pupilos. "Hay que estar contentos, pero solo una hora. Debemos apelar a la calma, porque tras la derrota del otro día hemos de extraer una gran lección. El equipo no hizo drama de ese doloroso partido y no se ha hundido. Eso es lo que debemos tener en cuenta", explicó.
En cualquier caso, el Gran Canaria continúa concediendo el cartel de favorito al Laboral Kutxa de cara a la confrontación decisiva que se celebrará mañana en la capital alavesa. "Aunque cada partido es una historia, lo normal es que ellos ganen por presupuesto, por factor cancha y por la calidad de sus jugadores. Nocioni, que ha sido elegido mejor alero de la ACB, es un ejemplo de ello", concluyó el catalán.