Vitoria. El Baskonia cosechó ayer una plácida victoria, la novena consecutiva entre ACB y Euroliga, tras superar un monótono trámite ante el CB Canarias que dejó sensaciones contrapuestas a Zan Tabak. Su cabeza pensante en el banquillo, que ha devuelto la confianza y la alegría a un vestuario estresado que demandaba un cambio de rumbo, se congratuló por los pocos puntos encajados ayer frente a los insulares. No obstante, al mismo tiempo lamentó las numerosas oportunidades desperdiciadas en los tres cuartos iniciales para romper el pulso.
"La primera premisa es que seamos agresivos en defensa y no arriesgar para permitir bandejas. En ataque, nos falta fluidez y otras cosas. Mucha gente pensará que el rival era flojo, pero no lo considero así. En ataque pueden llegar a ser muy peligrosos si están acertados. Por eso, estoy muy contento por los 62 puntos que nos han metido", precisó el técnico croata, que eso sí acabó descontento con la precipitación exhibida por sus pupilos en varias fases de un compromiso aburrido a más no poder. "En tres o cuatro momentos pudimos romper el partido e irnos a 20 puntos, pero no fuimos capaces de conseguirlo más por ansiedad y fallos en ataque que por errores defensivos", lamentó.
Como no podía ser de otra forma, Tabak valoró positivamente el estreno de un Omar Cook que, a su juicio, "es un base que lee muy bien el juego". Según el preparador balcánico, esta flamante cara nueva dará muchas alegrías al equipo en el futuro. "Tenemos 20 jugadas distintas y en dos días ha aprendido lo máximo que ha podido. Me ha gustado su agresividad sobre el hombre del balón de la primera parte, aunque después ha bajado tanto él como el equipo entero. Poco se podía esperar de alguien que sólo lleva dos entrenamientos. De toda la información que le habíamos almacenado, estaba un poco perdido. Lo positivo es que viene en ritmo y sabe dirigir. En algunos momentos, no sabemos escoger entre un contragolpe y un ataque posicional. Luego, es un jugador que puede presionar en defensa como yo quiero", alabó el máximo responsable baskonista, que se congratuló por "la mejoría física" del grupo que, entre otras cosas, permite subir las líneas de presión. "Ahora ya no nos cuesta tanto como antes porque hemos cogido nuevos hábitos y por mejorar el tono físico", puntualizó.
Mientras tanto, desde el CB Canarias no se puso paños calientes a una derrota sin paliativos que, pese a todo, dejó un buen sabor de boca a su entrenador. "Durante muchos minutos, hemos conseguido que estén desacertados, pero hemos fallado varios triples liberados. Nos vamos bastante contentos. En los momentos que nos acercábamos, ellos nos han castigado con varios contragolpes. Sabíamos que podía suceder y que la única forma de ganar era que hubiesen tenido un día horrible", reconoció sin ambages Alejandro Martínez.