VITORIA. Un profesional en todos los sentidos. Y es que pese al inminente inicio de la NBA y consciente de que en breve tendrá que regresar a Estados Unidos, Goran Dragic tiene claro que no se va a reservar lo más mínimo y "dará todo" por el Baskonia mientras siga perteneciendo a la disciplina del Caja Laboral.
El base esloveno asume que vino aquí a "ayudar al equipo" el tiempo que sea y esa es su intención hasta que se desvincule del club gasteiztarra para poner de nuevo rumbo a Houston. "Voy a dar todo", insistió. De hecho, el director de juego quiso dejar claro que ya había transmitido a Ivanovic su total predisposición para que cuente con él mientras esté a sus órdenes. "Ya le he dicho a Dusko que no sé cuando me voy, pero que mientras esté aquí voy a trabajar duro".
Sin guardarse ni reservarse nada antes de regresar a la NBA, como volvió a dejar claro. "En los entrenamientos trabajo duro. Ya lo conoce Dusko", recalcó. Ahora tan sólo falta saber cuando deberá emprender el camino de regreso a Estados Unidos. Los Houston Rockets le esperan, pero por el momento ni él ni su compañero Kevin Seraphin, que debe volver a los Washington Wizards, tienen claro hasta que día pertenecerán a la disciplina azulgrana. "No sé cuando me voy", apuntó el jugador esloveno.
La misma incógnita tiene el francés. "Tengo dudas. Probablemente esta sea mi última semana", precisó el interior galo. Así lo entiende también el propio Goran Dragic. El esloveno está a la espera de que se firme el acuerdo que decrete el final del cierre patronal para hacer las maletas. Además, tal y cómo desveló ayer deberá pasar antes por Liubliana para poner al día su visado.
Todo apunta a que el desbloqueo del lockout llegará a principios de la semana que viene, por lo que tanto Goran Dragic como Kevin Seraphin podrán jugar el jueves en Italia ante el Cantu y el domingo en Vitoria el derbi frente al Lagun Aro. Esa es la intención de Dragic. El base desea "jugar un partido más" ante su público para poder despedirse.
Y es que el jugador de los Houston Rockets está encantado en Vitoria y con el Baskonia. Por eso lamenta y le da "lástima" no poder continuar en el conjunto azulgrana. El jugador se muestra apenado porque al final por una cosa o por otra no puede quedarse mucho tiempo en Vitoria. "No tengo mucha suerte con este equipo. Tengo muchas ganas de jugar en este equipo y no puedo", lamentó. Al menos, Dragic quiso dejar una puerta abierta a un posible regreso en el futuro. "Me gusta la gente de aquí, la ciudad y ojalá que cuando termine en la NBA pueda jugar aquí", concluyó.
Ahora, que se van a ir dos jugadores, Fernando San Emeterio tiene claro que su ausencia "a corto plazo sí que va a afectar". El alero cántabro considera que se tratará de dos pérdidas "importantes" para el Baskonia, pero tiene claro que no queda más remedio que "asumirlo". "Los que estemos tendremos que dar el 100% para intentar suplir esas bajas si se van", añadió.