vitoria. Dos asombrosas actuaciones a domicilio ante el Cajasol y el Fuenlabrada, saldadas no sólo con 20 y 26 puntos respectivamente sino también una atroz sensación de supremacía que le dignifica como el mejor pívot de Europa, han servido para que Tiago Splitter vuelva a sembrar el terror en las defensas rivales. Tras haber dejado atrás el pequeño calvario que supuso su contusión ósea en el tobillo, el brasileño ya ejerce de nuevo como ese pívot dominante que carece de antídotos en la zona. Y todo gracias a unos progresos evidentes que el propio protagonista se encargó ayer de ponderar.
"Físicamente, me siento mucho mejor. Ya no sufro tanto desgaste durante los partidos, puedo llegar más fresco a los minutos decisivos y hacer la diferencia", confesó el de Joinville, cuyo percance en vísperas de la Copa del Rey y del arranque del Top 16 de la Euroliga supuso un jarro de agua fría. "Justo después de la lesión, es complicado estar al cien por cien. Poco a poco, el equipo está yendo hacia arriba en el aspecto colectivo", explicó la piedra angular azulgrana.
El hecho de que el calendario haya concedido una tregua al Baskonia con un partido a la semana está provocando que cada vez se sienta más cómodo a la hora de lucir su talento. "Ahora sí podemos cuidar más todos los detalles y no estar tan pendientes del rival. En Fuenlabrada, pude hacer un buen encuentro, pero soy consciente de que todos los días no será así. No me van a entrar las canastas, pero estoy contento por cómo me están saliendo las cosas".
Por su parte, Fernando San Emeterio subrayó la importancia de hacerse con el segundo puesto de la fase regular en dura competencia con el Real Madrid. "Es importante de cara a tener el factor cancha en la semifinal, pero lo que más nos motivas es la posibilidad de pelear por el título. Debemos centrarnos en trabajar bien para que el equipo llegue al play off en el mejor momento de la temporada", indicó el alero cántabro, el otro integrante baskonista más regular desde el arranque de la temporada.