Día para olvidar para el Kutxabank Araski. Las vitorianas hicieron este domingo de largo su peor partido de la temporada ante el Valencia Basket en una tarde donde no salió absolutamente nada. Además, enfrente estuvo un Valencia arrollador que se llevó por delante a las locales. Paso atrás de un equipo vitoriano que, en cualquier caso, está firmando una campaña brillante pero que esta vez se rindió ante ley del más fuerte. El líder de la Liga Femenina pasó por Vitoria como una auténtica apisonadora.

El inicio del encuentro fue una clara presentación de lo que iba a ser el partido. Y es que Made tuvo que pararlo rápidamente, ya que el Valencia se puso con un 0-9. Sin embargo, y aunque la entrenadora local lo intentó todo, su equipo no tuvo el día y no pudo aguantar el chaparrón valenciano.

Las jugadoras de Rubén Burgos castigaron mucho a las vitorianas desde el triple, hasta un total de 13, algo que junto a su juego colectivo –todas sus piezas alineadas en el día de ayer anotaron puntos– hizo que el Araski no tuviera opciones en ningún momento.

El encuentro comenzó con un anfitrión totalmente dormido. Un hecho que aprovechó el Valencia Basket para anotar tres triples consecutivos de Ouviña, Torrens y Cox que obligaron a Madelén Urieta a solicitar tiempo muerto, ya que el comienzo de su equipo no pudo ser peor.

El parón no despertó a las vitorianas y las de Rubén Burgos continuaron dominando sobre la pista. Por parte de las locales, Atkinson con una buena penetración anotó los dos primeros puntos de su equipo, pero Ouviña con un buen robo y posterior triple puso el 2 a 14 en el marcador.

Las rotaciones de Made no surtieron ningún tipo de efecto positivo y a pesar de un buen triple de Chagas, que dio algo de vida a las suyas, las vitorianas no estuvieron nunca dentro del partido. Un querer y no poder constante porque las pérdidas locales impidieron que se acercaran en el marcador. Mientras tanto, las valencianas siguieron a lo suyo y desde el triple continuaron aumentando la distancia en el luminoso (8-32).

El segundo periodo continuó con la misma dinámica, es decir con una férrea defensa valenciana que no dejaba respirar a las vitorianas. Además, en ataque continuó el espectáculo taronja con otros dos triples de Romero y Buenavida. El Valencia llegó a los vestuarios con 9 canastas de 15 intentos desde el 6,75.

El Araski anotó sus dos primeros puntos en este cuarto cuando restaban cinco minutos. La pívot Diarra fue la encargada de hacerlo con un buen movimiento debajo de canasta. Sin embargo, el del equipo vitoriano fue un ejercicio de impotencia, ya que Buenavida respondió de forma rápida con otra canasta desde la larga distancia.

Una buena combinación entre Alarcón y White permitió al Araski mejorar en sensaciones antes de llegar al descanso (15-49), pero todo fue un espejismo, ya que el paso por los vestuarios no cambió para nada el triste decorado.

A pesar de un breve espejismo en los dos primeros minutos de este tercer cuarto con una canasta y otra buena defensa del Araski, el Valencia detuvo esa pequeña reacción con su intensidad y calidad. El festival valenciano continuó hasta el final del encuentro y la alemana Gulich también se unió a la fiesta. La pívot alemana era la única que aún no había anotado de su equipo.

Las vitorianas ya perdían de 40 puntos y estaba siendo un partido difícil de disputar. Además, las malas noticias se le acumularon a Made, que vio cómo Chagas se retiraba de la cancha por malestar y no pudo volver a jugar. La entrenadora alavesa optó por dar minutos a las dos canteranas del equipo, Maider y Marina, quienes pusieron la nota positiva de la tarde al dejar buenos minutos sobre la pista.

En los últimos instantes del encuentro, las vitorianas pudieron maquillar algo el encuentro para terminar con un 43 a 96 en el marcador. Finalmente, el Araski cerró un partido para olvidar en una jornada fatídica donde no salió nada. Por lo tanto, ya toca pensar en su siguiente encuentro, también en Mendizorroza ante el Estudiantes.