El Ayuntamiento ya tiene en sus manos un amplio listado con nombres de mujeres que "se merecen el nombre de una calle", según las investigadoras Isabel Mellén y Virginia López de Maturana, aunque por ahora se hayan quedado en el tintero. Entre ellas, mujeres del ámbito local, como Macaria Iriarte.

Fue una vecina de Campezo que, sin apenas saber leer, le entró una afición tremenda por la lectura, así que memorizó cantidad de cuentos y se inventó otros, cuentos que narraba a los niños y niñas del pueblo. Al final, "se convirtió en una folclorista, en una de las últimas de Álava", subraya Mellén.

O Berengela López de Haro, una mujer mecenas en la época medieval que "nos dio dos conventos a la ciudad, pese a que los hemos tirado los dos", apunta la investigadora. "Me hubiera gustado que su nombre fuera en un espacio público cercano al convento de San Francisco, ya que fue ella quien lo propició", añade.

También mujeres contemporáneas como Ana de Begoña, "la primera catedrática que tuvimos en Álava y que también sufrió mucha violencia por el hecho de ser mujer", explica Mellén.

En otros casos, como el de la política del PNV María Jesús Aguirre, la decisión se ha pospuesto por la circunstancia actual que acompaña su nombre, ser madre del alcalde, Gorka Urtaran. "Dificulta ponerle una calle en la ciudad en este momento, pero es una mujer que se lo merece". No obstante, "entendimos que podía ser mal interpretado, tiempo hay...".