El pasado mes de agosto la Unidad de Medio Ambiente y Urbanismo de la Fiscalía General del Estado remitió una nota de prensa donde se informaba del inicio de la investigación de ahogamiento de aves, en balsas de regadío y contra incendios, y que se había instado a los agentes forestales de Madrid, Cataluña, Bizkaia y Andalucía a inspeccionar las balsas existentes en sus respectivos territorios, así como un informe sobre la normativa que las regula.

Aprovechando estas circunsntancias, Ekologistak Martxan remitió un escrito a la fiscalía donde, como explican, "por un lado les felicitábamos por la iniciativa y, por otro lado, les expusimos que nos llamaba la atención que solo se inste a investigar lo que sucede en Bizkaia, teniendo en cuenta que el territorio con un mayor número de balsas de riego es Álava, por lo que le instamos a que se amplié la investigación al conjunto de la CAPV o como mínimo que se incluya Álava en la investigación".

Por último, sugerieron que se podría ampliar la investigación a los canales y acequias, "donde todos los años mueren infinidad de animales y que suponen un gran impacto de fragmentación del territorio". En el escrito adjuntamos un informe realizado con la colaboración de vecinas de Argómaniz, que detalla lo que está sucediendo en el canal del río Alegría, entre ellos los 14 corzos que han caído en él desde marzo de 2020, tres de ellos con consecuencias fatales, además de erizos y liebres, por lo que instaban a la fiscalía a que si lo estimaba oportuno, se inicie una investigación al respecto.

El pasado 26 de agosto les contestaron desde la Fiscalía de Álava, informándoles del inicio de las diligencias de investigación sobre lo que está sucediendo en el canal del río Alegría, propiedad de Amvisa.

Soluciones inmediatas

En este sentido, Ekologistak Martxan vuelve a exigir a los propietarios del canal "soluciones inmediatas". En este sentido recuerda que tanto Amvisa, URA y la Diputación de Álava, "conocen la problemática" y que se han dado un plazo de seis meses para proponer soluciones, "después de años de total negligencia e inactividad, algo que nos parece totalmente fuera de lugar, ya que las soluciones son muy sencillas". Tal es el caso de las rampas salideras, al ser "sencilla, rápida y económica", como proponen sus vecinos.

De esta menera, el colectivo verde insta a poner fin a esta trampa mortal, ya que "cada día que pasa sin hacer nada es un riesgo inasumible para la fauna alavesa".