-El barrio de Landaluze de Llodio va a acoger, a partir de hoy la primera fase del proyecto que permitirá renovar por completo su red de aguas fecales. Una intervención que cuenta con un presupuesto total de 162.506,11 euros y que está prevista se prolongue durante unos cuatro meses.

La obra se va a desarrollar desde el cruce regulado por semáforos entre Zumalakarregi, Baias y Landaluze. Para ello, se ocupará la calzada en el carril de bajada, sentido Larrazabal, hacia Laudio en los tramos comprendidos entre los pozos nuevos a construir. Como consecuencia, estas obras van a provocar alteraciones del tráfico rodado en el carril de bajada y subida desde el cruce de Zumalakarregi y para poder regular esta situación, se va a habilitar un control mediante semáforos.

El proyecto pretende poner fin al mal estado de conservación de la red de saneamiento de esta calle, ya que presenta tramos de colectores muy degradados, existiendo varios puntos donde se juntan la red de pluviales con la de fecales. En concreto, los tramos deteriorados se encuentran en el casco urbano, por lo que se ha diseñado la instalación de una nueva canalización de saneamiento en Landaluze con cruce a la Avenida Zumalakarregi, a fin de conectarla a la red de fecales de esta calle. A la hora de acometer las obras, está prevista la demolición y relleno de todos los pozos y arquetas preexistentes, no acometiéndose la retirada de los antiguos colectores. En la nueva red, “se construirán todos los pozos y arquetas necesarias para garantizar su buen funcionamiento y registro”, matizó el primer edil, Ander Añibarro.

Por otro lado, la red de pluviales mantendrá su recorrido actual aplicando las pequeñas correcciones que permitan separarla de la red de fecales en aquellos puntos donde confluyen. “Gracias a este proyecto, se van a poder mejorar considerablemente las condiciones de salubridad y saneamiento del tramo de Landaluze, renovando completamente la red de colectores de saneamiento y el pavimento de la calzada”, subrayó el regidor.

Para realizar la reforma, se va a colocar una conducción de PVC con uniones elásticas de junta de goma a lo largo de la calle Landaluze y hasta el cruce con la Avenida Zumalakarregi, donde se conectará a los pozos de registro correspondientes. La nueva conducción se ubicará en zanja de 100 centímetros de ancho por 188 de profundidad media, aunque en algunos tramos será necesaria una profundidad mayor debido a la pendiente del terreno. En el fondo de la zanja se dispondrá de un lecho de arena silícea para el asiento de la conducción y se recubrirá con material seleccionado de la propia excavación y con rellenos procedentes de cantera. Por último, “se extenderá una capa de aproximadamente 15 centímetros de hormigón por toda la calle y se rematará el pavimento existente con imprimación con emulsión asfáltica calizo hasta coronación o remate con baldosa”, detalló Añibarro. Los pozos de registro de la red de saneamiento actual serán anulados, se demolerán y los escombros serán trasladados a vertedero. Además, se rellenará el pozo con material de zahorra artificial procedente de cantera o material todo uno. A continuación, se extenderá una capa de hormigón y se pavimentará con emulsión asfáltica caliza.

La reposición de acometidas domiciliarias a los nuevos pozos de registro se ejecutará mediante sustitución y empalme de tramos de tubería con conducción de PVC, entronque a pozo y sellado de juntas de forma que se asegure la estanqueidad. El pavimento asfaltico existente en la calzada y en la zona de aparcamiento será fresado, para, posteriormente, mediante mezclas de aglomerado asfáltico en caliente extendidas, realizar una capa de rodadura de 5 centímetros..