- Primero fue un mural, un gran mural aprovechando una espantosa pared de hormigón que miraba hacia una de las zonas más bonitas de Maeztu, el lugar por donde discurría la vía del Vasco-Navarro y donde se encuentra la estación, convertida hoy en Ayuntamiento. Después llegó la innovación, la realidad aumentada. Y con una app descargable allí mismo se puede vivir -jugando con el mural y con la propia calle- la circulación del Trenico, los objetos, los recuerdos y los sonidos.

Toda la primera parte, el mural, es obra de la artista Irantzu Lekue y de los propios vecinos de Arraia-Maeztu, que lo trabajaron durante cerca de año y medio. A continuación, con la colaboración del centro de investigación y desarrollo tecnológico Tecnalia (programa KSI Berritzaile de Gobierno Vasco) y la financiación de la Diputación Foral de Álava, el Ayuntamiento de Arraia-Maeztu y la Fundación Vital se ha culminado el proyecto Flashback: El Trenico. Se trata de un trabajo en el que se fusiona el muralismo con las nuevas tecnologías, y en concreto, con la realidad aumentada. Así, a partir de la aplicación Flashback: El Trenico, este mural permite al espectador ver, escuchar y sentir más allá del lienzo, con el objetivo de acercar e incluso sumergir a la ciudadanía en la memoria de la comarca.

Esta propuesta aborda la memoria de el Trenico, el Ferrocarril Vasco-Navarro, una línea ferroviaria que unía Bergara (Gipuzkoa) y Lizarra (Nafarroa) desde 1889 hasta 1967. El proyecto que ha tenido como uno de los lugares de materialización participativa el pueblo alavés de Maeztu, por donde pasaba el tramo que conectaba Vitoria-Gasteiz y Lizarra, ha sido el epicentro de la actividad, donde Lekue ha dado vida a un proceso de memoria que se compone de un mural participativo con los vecinos del pueblo, junto a una recopilación de imágenes y grabaciones, en las que se reflejan relatos propios de la espera, las gentes en aquella época y sus vivencias. De esta forma, el trabajo recoge objetos: maletas, silbatos, antiguos tickets y un sinfín de elementos, narraciones, sonidos... Que nos remiten a toda una cultura material e inmaterial que este proyecto recupera gracias a la colaboración y participación de muchas personas.

Todo ello se convierte en una ventana que permite a las visitantes "salir del lienzo" gracias a la realidad aumentada mediante una aplicación diseñada por Tecnalia, descargable en Google Play a través de un código QR que está en la propia pared. El usuario, mediante su móvil, puede acceder a relatos, objetos en 3D, imágenes de archivo e incluso contemplar el propio trenico volviendo a recorrer sus viejas vías, hoy convertidas en bidegorri. El proyecto utiliza tecnología de visión artificial, sistemas inerciales, y los últimos desarrollos en simultaneous location and mapping, para permitir al usuario interactuar en 6 grados de libertad con un dispositivo móvil en un entorno real de una forma robusta con los elementos virtuales que el mural y su entorno virtual nos ofrecen.