- El proceso de dotar a la ciudad de un Presupuesto para el año en curso con el que atajar los devastadores efectos de la pandemia se adentra en dos semana determinantes. Los próximos 15 días van a despejar el camino para conocer si el proyecto presentado por el equipo de gobierno (PNV-PSE) recaba el apoyo de alguno de los grupos de la oposición (EH Bildu, PP, Elkarrekin) o la falta de consenso aboca a Gasteiz a una prórroga presupuestaria.

La ausencia de una mayoría absoluta por parte del gabinete que encabeza Gorka Urtaran, obliga a tener que sondear entre las tres formaciones de la oposición y negociar con alguna de ellas el respaldo. El pasado año se escrutó esa vía con la abstención de los tres concejales de Elkarrekin, que posibilitaron que las cuentas salieran adelante.

De nuevo la formación resultante de la unión de Podemos y Equo Berdeak es el centro de todas las miradas para que vuelvan a hacer posible las cuentas de Gasteiz para 2021. El principal obstáculo que figuraba en el camino, como era la posible concesión de una licencia para sondear la exploración del pozo de gas en Subijana, se ha esfumado después de la decisión de los técnicos municipales de denegar esa petición formulada por la sociedad Shesa, dependiente del Gobierno Vasco.

La senda a una convergencia por segundo año consecutivo está mucho más despejada y los obstáculos a limar entre las posiciones de uno y otro frente se sitúan en cuestiones como las políticas de vivienda de alquiler para los jóvenes y avanzar de manera decidida hacia la fiscalidad verde o la economía circular, entre otros. La formación que encabeza Óscar Fernández ha puesto también en su punto de mira la partida de 100.000 euros para la ampliación del estadio de fútbol de Mendizorrotza y los créditos de compromiso fijados para los próximos años de legislatura y que atañen también a este proyecto.

Todas las posibilidades de acuerdo se orientan de manera casi prioritaria hacia Elkarrekin, ante la dificultad de encontrar un punto de común acuerdo con EH Bildu y PP. Con la formación soberanista, el único acuerdo presupuestario se firmó en el ejercicio 2016 y desde entonces no han vuelto a coincidir en ninguno de los grandes temas municipales ambos partidos. Con la formación conservadora, los únicos acuerdos cerrados fueron las ordenanzas fiscales de los años 2019 y 2020. Para el año ya en curso no se llegó a consumar un tercer pacto fiscal.

La semana que hoy comienza supone la llegada de unas fechas esenciales dentro del proceso que puede desembocar en la aprobación del Presupuesto 2021. El viernes concluye el plazo para que las distintas formaciones presenten las diferentes enmiendas que plantean a ese proyecto desvelado por el gabinete Urtaran. Con esos posibles cambios sobre la mesa, se ponen ya todas las cartas sobre la mesa en una negociación que debe resolverse en un tiempo limitado. Será en las jornadas que median entre este viernes 15 y el miércoles 20 de enero cuando deba conocerse si se alcanza esa fumata blanca para la aprobación final de las cuentas.

Para las jornadas del jueves 21 y viernes 22 de enero se procederá al debate y votación de las enmiendas presentadas, en el seno de una sesión extraordinaria de la comisión de Hacienda. A esas jornadas se suele presentar ya el equipo de gobierno con el acuerdo bien cerrado y sellado, de manera que la tediosa sesión de la comisión, se convierte en un mero trámite que sirve para escenificar el pacto. La votación final del dictamen de esas enmiendas es la antesala al Pleno municipal del martes 26 de enero, donde llegaría la aprobación inicial de las cuentas a ejecutar en Gasteiz en 2021.