- Uno de los grandes tesoros de Rioja Alavesa, los viñedos viejos, entre los que aún hay alguno anteriores a la filoxera que diezmó el territorio, han vuelto a recibir el apoyo de la Diputación Foral de Álava. Estos viñedos no son los más productivos y su mantenimiento obliga a dedicarles más horas y esfuerzo que a las plantas más jóvenes.

Pero su calidad, su valor y su diferenciación les ha hecho merecedores de esa mayor dedicación de los viticultores y del apoyo para su mantenimiento por parte de las instituciones. Gracias a ello existe un programa de apoyo, dotado de subvenciones que se acaban de conceder a quienes reunían los requisitos de la convocatoria.

Para este respaldo, las arcas forales han destinado en el ejercicio 2020 un total de 197.487,36 euros, con cargo al ‘Plan Mantenimiento Viñedo viejo’ del presupuesto de gastos de la Diputación Foral de Álava para el ejercicio 2020, fijándose un importe máximo de ayuda de 4.000,00 euros por explotación agraria.

Finalizado el plazo de presentación de solicitudes se contabilizaron un total de 193 peticiones y se propuso la concesión y abono a 188 explotaciones agrarias, dejando fuera a cinco de ellas. Los beneficiarios de esta campaña 2020 fueron 105 hombres, 18 mujeres, 45 sociedades civiles, una comunidad de bienes y 19 sociedades mercantiles.

Las ayudas consistirán en el pago a las personas beneficiarias de una prima por hectárea de viñedo ubicado en el Territorio Histórico de Álava, destinada a cubrir los costes adicionales y las pérdidas de ingresos derivados del compromiso suscrito, que se denomina lucro cesante, cuya cuantía se fija en función de la antigüedad: los viñedos anteriores a 1930 pueden tener una prima de 600 euros por hectárea; los plantados de 1931 a 1940 pueden recibir 540; los de la siguiente década, 420; y las viñas de 1951 a 1965, 300 euros.

Según los datos de la Diputación Foral de Álava, en el año 2018 se abonaron por tener viñedos viejos la cantidad de 150.081,28 euros y al año siguiente 172.099,51, y en la tercera campaña, han sido 197.487,3, una evolución que muestra el interés creciente por mantener estas plantas históricas.