- Prudencia con nuestra salud. Ése es el principio básico que va a regir la gestión municipal del gabinete Urtaran, la seña de identidad de su quehacer los próximos meses, después de que la pandemia del coronavirus haya costado la vida a más de 300 vitorianos. "Han sido los meses más duros que me ha tocado vivir como alcalde", reconoció ayer Gorka Urtaran en la primera sesión del debate de política municipal.

En el marco renacentista del palacio de Villa Suso y a distancia del resto de los corporativos como aconsejan las autoridades sanitarias, el alcalde anunció que el 21 de septiembre se hará un homenaje social a todas las víctimas del covid-19. Una jornada escogida por las instituciones vascas para recordar a los muertos y solidarizarse con sus familias y allegados. Más adelante, cuando la crisis sanitaria lo permita, Vitoria homenajeará a todos aquellos ciudadanos y colectivos que durante los meses de confinamiento han trabajado en primera línea para proteger a los gasteiztarras del virus. "La pandemia ha vuelto a demostrar que lo mejor que tenemos en Gasteiz son las personas, ciudadanos implicados con una ciudad ejemplo de solidaridad y entrega", manifestó el alcalde.

Ante un auditorio distribuido a lo largo de los 217 metros cuadrados de un espacio sostenido en las viejas murallas sobre las que se forjó Gasteiz, Urtaran organizó su discurso de futuro en torno a cuatro principios básicos: prudencia sanitaria, protección social, apoyo a la economía local y confianza e ilusión en el futuro de Vitoria. "Tenemos que tener respeto al virus, pero no miedo porque el miedo lleva a la parálisis", señaló desde la presidencia del amplio salón dedicado al vitoriano Martín Salinas, diplomático, camarero y embajador en la corte del emperador Carlos V.

En materia de protección social, el gabinete Urtaran va a centrar sus esfuerzos en atender a las personas mayores, que son la diana principal de esta pandemia. A atender el envejecimiento de la población gasteiztarra destinará el Ayuntamiento la mitad del presupuesto de Políticas Sociales. Los quince centros socioculturales de mayores serán el buque insignia para evitar su soledad y aislamiento. En unos meses abrirá el número 16, el de San Martín, que empezará a funcionar en diciembre. Otros pilares del gobierno que comparte con los socialistas serán aumentar el número de horas del servicio de ayuda a domicilio (SAD), básico para propiciar una vida autónoma a los mayores y potenciar los centros de atención diurna. Así, a la apertura del de la plaza del Renacimiento, junto al Iradier Arena, se sumará otro de 40 plazas, el próximo año.

Sobre la cuestionada atención en las residencias durante la crisis sanitaria, dada la elevada cifra de ancianos fallecidos en el Estado, Urtaran considera que, a diferencia de lo ocurrido en otras ciudades, la pandemia ha evidenciado que el modelo de Vitoria es válido, por lo que el Ayuntamiento va a seguir apostando por los apartamentos tutelados y viviendas comunitarias, ya que han sido un "cortafuegos" contra el virus. Se van a crear nuevas plazas ampliando el centro Aurora, con una inversión de 600.000 euros, y a reconvertir la residencia San Prudencio en viviendas comunitarias de pequeño formato para que las personas mayores reciban una atención lo más individualizada posible. Además, la ciudad gastará diez millones de euros en ayudas sociales y todas las personas en situación de exclusión residencial atendidas por los servicios sociales tendrán una alternativa habitacional en Gasteiz para que "no haya ni una sola persona viviendo en la calle".

El desplome económico sufrido en la ciudad con la crisis sanitaria ha cerrado negocios, dejado a miles de familias sin trabajo y ha hecho que Vitoria pierda lo recuperado los últimos años. Por eso, "la reconstrucción económica tiene que empezar por nuestros negocios", indicó el alcalde. Tras una inyección de 70 millones de euros, el Ayuntamiento no cobrará la tasa de basuras correspondiente al periodo vigente del estado de alarma a los negocios que tuvieron que cerrar porque así lo ordenó la ley. Una medida que beneficiará a más 13.000 bares, restaurantes, comercios y empresas de servicios. Y ampliará hasta septiembre la moratoria del pago del alquiler de locales municipales a los negocios cerrados por la pandemia. A más largo plazo, el empeño del alcalde es que Gasteiz transite de una ciudad verde a una economía verde. Y que también lo haga el Ayuntamiento mediante un pacto por la sostenibilidad de la economía municipal que ofreció a la oposición, con guiño incluido al PP ya que, aunque la deuda y el déficit se han reducido estos últimos años en 103 millones de euros, ningún alcalde ha solucionado todavía el principal problema de las arcas municipales: su nula capacidad de ahorro para hacer frente a imprevistos como la pandemia del coronavirus. "Para ello necesitamos mayoría en el Pleno", señaló en su llamamiento a PP, EH Bildu y Elkarrekin. "Cabeza, capacidad y corazón son los tres ingredientes que necesitamos", esgrimió Urtaran. Asimismo, deslizó un posible aumento de los impuestos, precios y tasas municipales al explicar que el esfuerzo fiscal de cada vitoriano sigue reduciéndose año tras año hasta situarse en 608 euros por habitante en 2019.

Elevó y afianzó el alcalde su voz al referirse al cuarto pilar de su discurso, la confianza en el futuro de Vitoria, al que mira con optimismo e ilusión, pese a la que está cayendo, y "sin renunciar a ningún proyecto de la agenda vitoriana", pero ajustando dicha hoja de ruta porque la crisis sanitaria ha aflorado nuevas urgencias. El debate general de política municipal tendrá hoy su réplica con las intervenciones de los partidos de la oposición.

alcalde de Vitoria, adelanta que el 21 de septiembre será una jornada de recuerdo para los más de 300 fallecidos en Vitoria por el covid-19.

"Homenajearemos a las víctimas y a los que han trabajado en primera línea para protegernos"