VITORIA - La llamada a la fiesta de San Prudencio y la virgen de Estíbaliz no puede tener mejor animadora que Maite Ruiz de Austri. De su imaginación y talento saldrá el pregón para arrancar la celebración.

Un privilegio ser la encargada del pregón este año y abrir el ciclo festivo de los patrones de Álava.

-A todas las personas que nos eligen como pregoneros nos sorprende al haber muchos candidatos para poder desempeñar esa función, pero terminan por elegirnos a uno entre todos ellos. Es un honor anunciar y hacer la llamada a la fiesta a todos los alaveses para disfrutar de San Prudencio y la virgen de Estíbaliz.

Ocasión única cuando se recibe el encargo de la Diputación de Álava y que no se puede dejar pasar.

-Cómo no. Es un privilegio y honor, aunque luego llega el trabajo de tener que escribir ese pregón y seleccionar aquellas cosas y aspectos que se quieren señalar en el mismo. Cada pregonero se centra en él mismo o la actividad que desempeña en representación de su sector de actividad y trabajo. A lo largo de estos años he asistido a pregones con temática deportiva, científica, literaria o de arquitectura. En este caso tengo claro que va a ser un pregón cinematográfico y como mujer, dedicado a todas las que trabajamos en el mundo del cine.

Trama y personajes para construir un guion animado.

-Hay unas cuantas cosas de las que poder hablar, desde luego. Mimbres no faltan en estas fiestas al contar con un montón de cosas muy cinematográficas. Tendré que ir viendo, a medida que se acerque la fecha, como lo voy a hacer. No hay que olvidar que se trata de un pregón para la llamada a la fiesta a todos los alaveses y debe ser algo festivo, como pistoletazo de salida para disfrutar.

Esa es la clave, dejar ese anzuelo y, en su caso, animar a todos.

-Son unos días de celebración para los alaveses y de los alaveses con motivo de San Prudencio y Estíbaliz. Para sentirse alavés, pasarlo bien y regocijarse con todas las actividades del programa para pasarlo bien.

¿Le ha permitido su trayectoria profesional disfrutar de muchas jornadas de San Prudencio y Estíbaliz en Álava?

-Por cuestiones de trabajo me ha tocado viajar muchísimo y los primeros años de mi infancia los viví lejos de Álava, en Polonia concretamente. Pasó mucho tiempo hasta que pude empezar a disfrutarlo, pero sí he tenido ocasiones de pasarlo muy bien y son unas fiestas que siempre están ahí.

De esas ocasiones que lo ha celebrado, ¿cuál es su momento o rincón especial en el que más disfrutar de San Prudencio y Estíbaliz?

-Me resulta difícil elegir y quedarme con uno en concreto. Cada año y en cada ocasión es una celebración y fiesta diferente. A medida que uno crece y se va haciendo mayor van surgiendo diferentes intereses en la manera de celebración de cada fiesta. En alguna ocasión es en las campas de la basílica de Armentia, con los amigos, cuando más disfrutas. En otras ocasiones optas más por la tranquilidad viendo toda la fiesta como un simple espectador. Según creces se disfruta de diferente manera unas fiestas como las de San Prudencio y la virgen de Estíbaliz. Es una cuestión que le pasa a todo el mundo, pero siempre con esa vocación de que los alaveses disfruten.

¿Le va a entorpecer la elaboración del pregón en el ajetreo de la actividad profesional?

-Habrá que sacar un rato para ello y que salga bien. Ahora estoy dirigiendo una serie de animación aquí en Vitoria, para la productora Zeppelin, pero es una serie para Netflix. Sacaremos un rato para hacer un buen pregón.