Luismi Corres tiene hambre de cancha, de ponerse en el lateral y entrenar, pero su deseo no parece estar muy cerca. Su sitio, por el momento, sigue estando en los despachos. Acaba de comenzar su segunda legislatura al frente de la Federación alavesa de baloncesto y sabe que lo de entrenar tendrá que seguir esperando. «No me dejan. Yo quiero que alguien tome el relevo, pero no aparece nadie y encima me dicen que yo lo que tengo que hacer es coordinar y gestionar, que lo hago bien», asegura.
En 2016 eras director técnico de la Federación y, ante la marcha del presidente y la falta de gente dispuesta a tomar el mando, asumió el cargo y ahora ha renovado mandato. ¿Qué Federación tiene entre manos?
Pues diría que en lo que respecta a deporte escolar, con el anterior presidente conseguimos pasar, por ejemplo, de 120 equipos femeninos a 170 y con la pandemia hemos retrocedido un 20% aproximadamente. En chicos un 15% y en federados/as las cifras son muy similares. Así que ahora mismo estamos en una situación en la que toca remar, sobreviviendo y funcionando de forma inteligente con los recursos que tenemos.
¿Esperaba estas cifras?
Tenía peores expectativas, pero hemos trabajado con los colegios para modificar las normas y permitir se impliquen en las propias normas de competición y hemos dado un paso de calidad al frente. Además, el hecho de que se sientan parte de nuestro entorno deportivo es importante.
¿Qué tipo de normas se han cambiado en el deporte escolar?
Lo más destacado es que la categoría benjamín la hemos separado en primero y segundo año y en los alevines de primer año jugamos 4X4, lo que implica que los niños/as tienen más tiempo de valor. Ahora pasamos del 3X3 de benjamín, al 4x4 de alevín de primer año y al 5x5 en el segundo año.
¿Qué objetivos buscan con estas medidas?
El objetivo de todas nuestras acciones es único: hacer que la pirámide deportiva escolar sea lo más grande posible, que con el tiempo el volumen se reduce. Hemos adoptado la doble E: educar y enseñar: educar niños/as y enseñar baloncesto. Para que esto se de hace falta que haya más entrenadores formados y mejores árbitros.
Da mucha importancia a la formación de entrenadores y árbitros, pero la respuesta no le tiene muy contento.
Actualmente para entrenar y arbitrar partidos no hace falta titulación. Quien arbitra lo pone el equipo local, sin más. Nosotros creemos que para ambas cosas hay que tener una preparación, que los niños y las niñas vayan al campo que vayan a jugar, vean que las normas son siempre las mismas. Nos parece fundamental y para ello organizamos formaciones, pero luego la respuesta€ En noviembre convocamos a un curso de 5 horas, preparamos sala, calefacción, material€ y no apareció nadie.
¿Echa en falta compromiso?
Hace falta implicación: de las AMPAS, de colegios, de la Diputación. Como no se obliga no se hace. Hace falta que los colegios formen entrenadores y árbitros para que puedan aplicar y enseñar las normas establecidas y que las instituciones les obliguen a ello. Mientras esto no pase.
También le ha tocado hacer una llamada de atención con la mascarilla.
Efectivamente. Voy los campos y veo que ya hay una relajación total y a la gente hay que recordarle que hay una normativa que establece que solo pueden estar sin mascarilla quienes estén practicando deporte en ese momento en el terreno de juego. La gente que está en el banquillo, los entrenadores, delegados, público, quien está en la cafetería... todo el mundo debe llevar mascarilla. A ver si conseguimos que la gente se dé cuenta, que el baloncesto se juega en polideportivos cerrados y que no nos la podemos jugar a que se suspenda otra vez el deporte escolar.