El Alavés, de nuevo en el filo
Los tres puntos de renta con el descenso tras los adversos resultados de la última jornada aprietan un tanto la situación clasificatoria
La derrota del pasado domingo ante el Real Madrid, unida a las victorias de Girona o Mallorca, ha comprimido si cabe aún más las posiciones de peligro en la clasificación. Al extremo que la escuadra albiazul está a tres puntos de los puestos de descenso, que precisamente lo marca ahora el cuadro gironí.
Eso sí, a su favor que hay en ese intervalo de un triunfo cinco equipos involucrados y aún perdiendo el próximo sábado en Pamplona ante el Osasuna, que es uno de ellos, no caería directamente al infierno, aunque sí le dejaría más cerca que nunca. Y es que el Valencia y Mallorca se enfrentan entre sí, en otro compromiso crucial en la pelea por alejarse de la zona comprometida.
Los números del Alavés, a examen este martes
Tres puntos de los últimos quince en disputa han llevado al conjunto dirigido por Eduardo Coudet a dilapidar la ventaja que hace un par de meses tenía y que incluso permitió a alguno de sus futbolistas elevar de manera pública la exigencia final a algo más que la permanencia.
Cierto es que en la jornada séptima, tras caer en Mallorca, la renta con los puestos de descenso era igualmente de tres puntos, aunque entonces el puesto de los albiazules era el undécimo, uno por encima del actual. Ahora ya el análisis es más ajustado que entonces, ya que se han disputado el doble de encuentros y por ende el final de la primera vuelta está prácticamente al caer.
Dos duelos directos
De hecho, otro de los aspectos a tener en cuenta y que pueden revertir la vigente situación del cuadro vitoriano es el tramo más inmediato que tiene por delante hasta el arranque de la segunda parte del campeonato. De los tres envites que le quedan dos son ante rivales directos, el citado Osasuna este sábado en la capital navarra y dos días antes de la festividad de Reyes ante el Real Oviedo en Mendizorroza, rival que va ya a por su tercer entrenador y que no gana precisamente desde la séptima jornada.
Carlos Vicente, un revulsivo que no es suficiente
Luego le tocará medirse a todo un equipo Champions como el Villarreal, pero es evidente que de lograr los próximos seis puntos la tranquilidad volvería al alavesismo al inicio de 2026. Curiosamente no es menos cierto que en lo que va de temporada, la escuadra vitoriana no ha logrado imponerse de manera consecutiva en dos partidos. Es por ende otro reto al que se enfrenta en el final del presente año y comienzo del siguiente el Deportivo Alavés.
Capaz de ganar tan solo como visitante en San Mamés en la cuarta jornada, el equipo vitoriano está ahora más obligado que nunca a celebrar su segundo éxito como foráneo cuanto antes, después de haber caído ante el Celta y Real Madrid en casa.
Ciertas obligaciones en suma que llevan a exigir un paso más al colectivo y en varios casos en lo particular a jugadores que por diferentes razones no han terminado de dar el nivel que se les presupone.
Los dos próximos encuentros ligueros ante rivales directos como Osasuna y Real Oviedo pueden ser un punto de inflexión para recuperar sensaciones
Los problemas en la faceta goleadora son evidentes –Vicente es el máximo goleador con cuatro dianas, tres de ellas de penalti– y en cierta forma ahora se reflejan un poco más cuando en determinados momentos de estos últimos compromisos los de Coudet han perdido algo de empuje a la hora de apretar e ir a por los rivales desde el inicio.
Dicha seña de identidad les había hecho reconocibles en otras fases de la temporada y ante ello ahora el propio entrenador y alguno de sus jugadores no han tenido más remedio que reconocer que por ahí el Deportivo Alavés ha podido dejarse, al menos, la posibilidad de sumar algún punto más de los que tiene en la actualidad, suficientes eso sí para no estar actualmente en descenso.