La visita del Deportivo Alavés a San Mamés, donde cayó por 2-0 frente al Athletic, tuvo dos partes muy diferenciadas. Una que duró media hora, en la que los babazorros fueron mejores y, aunque sin éxito, disfrutaron de ocasiones para tomar ventaja en el electrónico, y otra que se prolongó desde que Luis Rioja falló el penalti, lo cual desarmó por completo al equipo, hasta el final de la contienda, con los rojiblancos muy superiores

En ambos escenarios, hubo un futbolista albiazul que destacó por encima de los demás: Antonio Blanco. El mediocentro cordobés brilló cuando mejor estaba el Glorioso, dotándolo de una salida limpia y efectiva, y también se mantuvo dentro del choque durante la hora de juego en la que los bilbaínos acapararon todo el protagonismo. Sin tanto balón, como es lógico dada la superioridad local, pero redoblando esfuerzos en tareas defensivas.

Blanco, echando un vistazo a los datos (FotMob y WhoScored), acabó el derbi como el tercer jugador del Alavés, junto a Javi López, que más veces tocó la pelota (52) –solo por detrás de Abdel Abqar (57), Rafa Marín (54) y Andoni Gorosabel (53)– y el segundo con más pases precisos (33/41). Además, Iñigo Ruiz de Galarreta (12) fue el único que completó más recuperaciones que él (8) en toda la noche, en relación con su aportación a la retaguardia. 

Antonio Blanco fue el segundo jugador que más recuperaciones realizó del derbi, solo por detrás de Ruiz de Gallarreta. AFP7 vía Europa Press

Por si los datos, aparte de las sensaciones, no fueran motivo suficiente para destacar al cordobés en San Mamés, también es posible analizar una de las acciones clave del partido. Cerca del minuto 15, los gasteiztarras pudieron tomar ventaja en un contragolpe que finalizó Jon Guridi, siempre desafortunado, pero que no hubiera sido posible sin el ocho babazorro, quien inició la jugada con un rápido y medido desplazamiento largo a Samu Omorodion.

Una ejecución similar, cabe recordar, fue la que le dio el triunfo al Alavés frente al Rayo Vallecano hace pocos días. Si bien fue la bonita definición de Gorosabel la que acaparó todas las miradas, y con razón, la asistencia de Blanco no se quedó atrás en cuanto a talento se refiere. Su actuación, en términos generales, fue de tanto nivel que hasta el propio Luis García Plaza no dudó en deshacerse en elogios hacia él en la rueda de prensa posterior.

EN LÍNEA ASCENDENTE

Teniendo en cuenta sus dos últimas apariciones, frente al Athletic y el Rayo, resulta evidente que Antonio Blanco va por el buen camino. Siempre ha tenido un papel importante en el esquema del Glorioso, al que aporta mucho equilibrio en la medular; pero, desde hace semanas, ha dado un paso más. Además de cumplir con su habitual labor oscura, en la que no llama la atención, ahora también arriesga y participa más en la creación de juego. 

Y esto último, que el cordobés vaya creciendo en la máxima categoría, es una gran noticia para el Alavés. No solo con el objetivo de terminar la presente temporada de la mejor manera posible, sino de cara al proyecto de los próximos años, pues la de Blanco, cabe recordar, es una de las mayores apuestas del club gasteiztarra en los últimos tiempos. Se le firmó hasta 2027, después de pagar al Real Madrid una buena cantidad por su traspaso.

Repasando la campaña del ocho albiazul, puede comprobarse que ha participado en 26 de los 29 compromisos ligueros de la escuadra alavesista, disputando un total de 1.848 minutos. Asimismo, ha sido titular en 22 de ellos y, de los tres que se ha perdido, solo uno ha sido por decisión técnica –contra Osasuna en El Sadar, donde Carlos Benavídez tomó el relevo–. Ante el Athletic (J6) y el Betis (J9) no jugó por lesión y sanción, respectivamente.