“Súbete con nosotros al tren que te lleva a Primera, que te lleva a Primera otra vez”, cantaba la grada de Mendizorroza hace siete años cuando el Alavés de José Bordalás peleaba por lograr el ascenso a la Liga de las Estrellas. Los seguidores más veteranos del cuadro babazorro también popularizaron en su día el famoso “este año sube el Alavés, sube el Alavés, sube el Alavés”.

Confianza ciega entonces y también este curso. Así lo ven al menos Juan Antonio Compañón Konpa, Martín Fiz y Álvaro González de Galdeano. Cuestionados sobre las posibilidades de que la escuadra dirigida por Luis García regrese a Primera, la respuesta es unánime: sí. “Le va a tocar sufrir, pero creo que lo consigue”, apunta Álvaro. Ese es el deseo también de Konpa. “Espero que sí. El corazón me dice que sí”, señala de inicio el exjugador de cesta punta, quien eso sí prefiere mostrar una cierta cautela. “La cabeza me dice que bueno... Que hay que ir con mucho cuidado”, añade.

Al menos, el apoyo de la fiel afición albiazul jugará un papel clave en el reto del ascenso, en opinión de Fiz. “Se lo van a tener que ganar. Nadie dijo que iba a ser fácil y parece que hasta ahora por el hecho de que parece que tienen que subir sí o sí, eso les ha provocado cierto miedo escénico y han estado atenazados. Pero bueno, aunque la incertidumbre va a estar hasta el final, el Alavés subirá y la afición será la culpable de que lo haga”, destaca el atleta.

EL PAPEL DE LA AFICIÓN

Y es que el jugador número 12 jugará “un papel muy importante” en este sprint final hacia el ascenso, según precisa el maratoniano. Konpa coincide con el campeón del mundo. “La grada, yo que me suelo sentar en Polideportivo, el empuje que da es grande y los jugadores notan ese empuje y la presión que ejerce Mendizorroza. Los equipos rivales lo saben y venir con ese handicap en la cabeza se nota”, explica el puntista.

Eso sí, el gasteiztarra tiene muy claro que al Alavés no le valdrá con los partidos de casa y que deberá mejorar fuera si quiere hacer realidad el objetivo. “Mendizorroza va a jugar un papel importante, pero solo con Mendi no va a valer. Por eso, aparte de empujar aquí, el equipo deberá empujar algo fuera. Por lo menos no perder”, considera el que fuera oro olímpico en Barcelona’ 92.

González de Galdeano, por su parte, entiende que el papel del aficionado es importante pero quiere matizar que al final todo pasa por los jugadores. El exciclista de Euskaltel-Euskadi, Vitalicio y Once, entre otros equipos, acude a un símil ciclista para exponer su opinión al respecto. “Esto es como el pelotón ciclista en un puerto. Por mucho que haya afición, si tu no le das pedales no vas a ningún lado”, aclara.

LA FAMILIA SUFRE UNIDA

El ganador de varias etapas en Vuelta y Giro aconseja a los futbolistas albiazules que estén “relajados” en este tramo clave de la temporada. “Ellos quieren hacerlo bien. Saben que la afición está con ellos, pero deben hacer su trabajo y necesitan estar relajados”, insiste el mayor de la saga de los Galdeano.

Todos unidos a por el ascenso. Y en familia. Así lo reconocen también estos tres deportistas. En sus respectivas casas se vive con pasión el devenir del cuadro babazorro en este curso. “Mi hijo Hugo tiene 10 años y la verdad es que sufre. Sufre mucho. Él está convencido de que se va a subir. Le tira mucho el corazón.”

Fanático del Glorioso también es Eder, el hijo de 5 años de Konpa. “El mío no se pierde uno. Es socio con toda la familia. Se pone ahí en Polideportivo con todos sus primos en la parte de abajo y está encantado con el Alavés. Para él no hay otro equipo. Tiene la equipación, lo vive y para él sería el recopón poder vivir un ascenso”, comenta emocionado el puntista vitoriano.

El hijo de Martín, Álex, algo mayor que el de sus otros dos colegas ya que ha cumplido las 30 primaveras, también es un incondicional. “Es socio y viene a Mendi a todos los partidos”, apunta Fiz.

Fieles de nueva generación. La semilla que sembró el Alavés durante sus años en la máxima categoría ha servido ahora para que los más pequeños se enganchen al equipo de su ciudad. “Los años de Primera han tenido su calado. Ahora toda la juventud y todos estos chavales de 10, 15 o 20 años son del Alavés. Y aunque este año milite en Segunda, están con la ilusión de vamos a volver a enganchar la Primera”, cuenta Compañón.

“La Primera ha marcado. Se ha sembrado la semilla de la futura afición del Alavés”, corrobora Álvaro. Una hinchada que merece estar en lo más alto tras lo visto esta temporada y que confía en que su equipo dé ese salto a la élite. Todos los albiazules así lo ansían. “Es un equipo de Primera y esperemos que recupere el sitio donde merece estar”, recalca Fiz. El Alavés está en camino. “Súbete con nosotros al tren que te lleva a Primera, que te lleva a Primera otra vez...”. l