El Deportivo Alavés necesita dejar atrás su via crucis de las últimas jornadas y poner su foco en los primeros clasificados. El conjunto babazorro, que recibirá a las 18.30 horas a un Tenerife en alza tras su victoria en el derbi canario, dispone de uno de sus últimos cartuchos para acercarse a los puestos de ascenso directo.

Luis García tendrá que superar una jornada en la que no estarán disponibles por sus compromisos internacionales dos piezas clave en el once como Blanco y Abqar, además de Owono y Balboa. No en vano, el técnico madrileño actualizó el estado de forma de Benavídez, quien presumiblemente verá desde el banquillo la actuación de sus compañeros tras una “leve lesión que se produjo el jueves”, tal y como explicó el madrileño.

Ante las numerosas bajas que sacuden al once babazorro, Luis García alentó a sus pupilos para duplicar los esfuerzos ante el Tenerife. “Es el momento de que la plantilla saque su carácter. Hay que sacar el partido adelante con el sacrificio de todos. El equipo está dispuesto y quiero ver a mis jugadores en estas circunstancias”, argumentó el técnico babazorro durante la previa de la contienda, donde mostró su máxima motivación por el próximo desafío.

Luis García estará obligado a reajustar su once de cara al duelo ante el Tenerife. La retaguardia, que cuenta con las bajas de Abqar y Maras, contará con la titularidad de Laguardia, que esta temporada ha perdido protagonismo sobre el verde. En lo que respecta a la sala de máquinas, la teórica pareja en la medular apunta a estar formada por Moya y Salva ya que Benavídez está en una situación física delicada y Blanco está comprometido con la Sub-21.

El rival que pondrá a prueba la fortaleza anímica del Glorioso será una escuadra con la moral por las nubes después de su contundente triunfo en el derbi canario. “El Tenerife estuvo a un partido de subir a Primera. Es un equipo con la base construida al sumar dos temporadas con Ramis. Trata muy bien la pelota e intenta construir y elaborar. Se junta bien defensivamente y tenemos que estar a buen nivel porque vendrán con la moral a tope”, destacó Luis García respecto a su rival, que en los 16 compromisos lejos del Heliodoro ha sumado tan solo 12 puntos.

El Tenerife, que durante el pasado curso se caracterizó por su pragmatismo en defensa y su solidaridad en la presión, ha crecido en sus tareas con el balón y es una dura piedra de toque para los babazorros. De hecho, la zaga albiazul ha de estar alerta con Enric Gallego, que afronta su llegada a Mendizorroza con ganas de prolongar su idilio con el gol.

La delantera, a examen

Tras unas últimas jornadas en las que el Alavés ha estado lejos de exhibir su poderío ofensivo, la capacidad goleadora de los arietes albiazules estará a prueba. Pese a la insistencia que se vio en la media hora final ante la Ponferradina y, en especial, durante el choque ante el Lugo, el Glorioso fue incapaz de derribar el muro en ambos escenarios y el momento de descorchar la botella llega ante el Tenerife.

No obstante, Luis García trató de quitarle hierro a la dependencia sobre sus arietes y añadió que el gol es trabajo de todo el equipo y que, en este sentido, los futbolistas de segunda línea han de dar un paso al frente. “Los delanteros trabajan bien. No solo ellos tienen que meter goles, todos tenemos que recuperar el gol y ojalá sean los delanteros porque son los que más marcan, aunque firmo ganar con un gol de Sedlar”, reconoció el preparador albiazul.

Con todo, el Deportivo Alavés dispone de uno de sus últimos cartuchos para acercarse a los puestos de ascenso directo. La distancia respecto al segundo clasificado, que es actualmente de cuatro puntos, es una marca asequible siempre y cuando el Glorioso cumpla con su tarea. Por ello, el técnico babazorro se mostró orgulloso hacia el curso que están realizando sus pupilos: “Estoy ilusionado al máximo, llevamos 31 jornadas entre los cinco primeros y 14 en ascenso directo”.