El Alavés terminó su aventura en la Copa al perder en Granada en una desafortunada acción que sentenció el partido con un autogol de Patricia. La presión alta del equipo vitoriano le permitió frenar la salida del Granada y jugar muy lejos de su área. 

Salió con mucha intensidad el equipo vitoriano, con Chamorro como punta de lanza, que propició el primer remate detenido por Romero. Se la tenía que quitar de encima el Granada, que se mostraba muy incómodo en la salida del balón. No le dejaba pensar el equipo vitoriano, que hacia las transiciones con mucha velocidad. 

Se desdoblaba por las bandas el equipo vitoriano y en una de las primeras acciones, Elene buscó a Chamorro pero interceptó la zaga local. Pero sería el Granada por medio de Alicia la que tuvo la primera oportunidad en un remate que salió cerca del palo. En el Alavés, la paraguaya Chamorro polarizaba el juego de ataque, indetectable para la defensa granadina, pese a su buena disposición táctica. 

Llegaba poco el Granada, le costaba superar líneas, pero Ángeles remató cerca del larguero y al filo del descanso, dispuso de una gran oportunidad que neutralizó Camila tras un despeje inicial de Patricia. Terminaba así un primer tiempo con alternativas y con un Alavés que quiso mandar pero se encontró un rocoso Granada. Pero en la segunda parte el Alavés dio un paso adelante y superó a un Granada que no encontró líneas de pase ni estabilidad en su juego. 

Más dominio albiazul en la segunda parte

Nada más empezar, el colegiado anuló un remate de Aby Manou a la salida de un córner por falta previa. Chamorro asumía de nuevo el protagonismo creando el pánico cada vez que cogía el balón, desordenando a la defensa local desde las bandas. Con el paso de los minutos se ponía de manifiesto que las Gloriosas mandaban y llevaban la iniciativa. Pero el Granada no se rendía y resistía con orden y paciencia. 

El Alavés porfiaba aunque no conseguía profundizar con suficiente claridad y asumía riesgos que le comprometían porque el Granada aprovechaba cualquier ocasión para el contraataque y una buena transición del Granada terminó con un pase interior de Naima que Ángeles remató enviando cerca del palo. Poco después, Laura remataba dentro del área y el balón se iba por encima del larguero.

Las de Juaristi seguían buscando la portería del Granada y Aby Manou iba con todo en un remate de cabeza que salió cerca del poste. Pero había perdido fluidez el equipo vitoriano, al que le costaba quitarle el balón a las granadinas. Y a la salida de un córner, un balón con mucho veneno en el corazón del área provocó una mala salida de Patricia que terminó en una extraña acción en gol en propia puerta de la portera visitante.

Quedaban cinco minutos pero el Granada jugaba con mucho criterio y depurada técnica para reducir a un Alavés al que le faltaban ideas. A la desesperada salieron Carrillo y Sanadri, pero ya era demasiado tarde. Sanadri tuvo una clarísima que sacó la portera local y Carrillo dispondría de un último remate, pero la suerte fue esquiva esta vez.