El Deportivo Alavés ya tiene a su afición de camino al Ciutat de Valencia. A lo largo de la mañana, los 405 abonados albiazules que consiguieron las preciadas entradas financiadas por el club para el Levante-Alavés de esta tarde han ido partiendo desde Mendizorroza rumbo a Valencia, divididos en siete autobuses. Los dos primeros han salido a las 4.00 horas, con alrededor de un centenar de madrugadores a bordo, con el objetivo de llegar a las 12.00 horas a la ciudad y poder aprovechar el día para visitarla y, por qué no, calentar motores con una paella.

Cinco horas después, a las 9.00, ha sido el turno del resto de seguidores, que se han repartido en cinco autobuses y que llegarán a la capital valenciana con el tiempo suficiente para dirigirse tranquilamente al estadio del Levante, donde se reunirán tanto con quienes han viajado a primera hora de la mañana como con quienes prefirieron desplazarse por su cuenta ayer o el viernes a la tarde para pasar el fin de semana en la ciudad del Turia.

Una vez en la grada harán todo lo posible por empujar al equipo y ayudarle a lograr un triunfo que le permita llegar vivo a la última jornada. Siempre, claro está, que el Cádiz no gane su compromiso contra el Real Madrid, que se disputa también a las 19.30 horas.

Ya en la salida desde el aparcamiento de Mendizorroza se ha podido palpar el buen ambiente existente entre los aficionados, luciendo los colores albiazules con camisetas, bufandas y banderas, así como cierta ilusión mezclada con nerviosismo. Por delante les espera un largo viaje por carretera que, no obstante, merecerá sin duda la pena si se regresa con el objetivo cumplido. De ello dependerá también lo cuesta arriba que se haga el lunes a quienes mañana deben madrugar de nuevo para acudir a sus puestos de trabajo o a clase.