asta la temporada 1928-29 no se disputó el primer Campeonato de Liga en el fútbol estatal. Hasta entonces, a nivel nacional, el torneo futbolístico más importante era el Campeonato de España, mal llamado Torneo de Copa con sus diferentes acepciones, cuya primera edición data de 1902, con la denominación Concurso Madrid, con motivo de las fiestas de la coronación del rey Alfonso XIII y organizado por el Ayuntamiento de Madrid. El vencedor fue el Vizcaya de Bilbao, que se impuso al Barcelona (2-1). A medida que este torneo fue adquiriendo mayor popularidad, porque al principio participaban en el mismo equipos invitados o seleccionados, hubo que delimitar su masificación, al querer competir gran número de conjuntos en el Campeonato de España. La elección para participar parte de los campeonatos regionales, que estaban estructurados por categorías o divisiones: Serie A (Primera), Serie B (Segunda) y Serie C (Tercera), con sus correspondientes grupos o subgrupos, excepto en la Serie A. Cada región futbolística en su Serie A, dependiendo de su categoría, clasificaba uno, dos y, en ocasiones, hasta tres conjuntos para esa fase final del Campeonato de España. La Federación Vizcaína, una de las más importantes y reconocidas del fútbol estatal, llegó a clasificar a tres conjuntos para el torneo del KO y el Deportivo Alavés pertenecía, al principio de su vida deportiva, a la Federación Vizcaína de Fútbol. El conjunto albiazul participa en la fase de ascenso de la Serie C a la Serie B en la temporada 1923-24, no participa en ningún campeonato en la 1924-25, por una fuerte desafección con su federación regional. Participa en la Serie B vizcaína en las temporadas 1925-26 y 1926-27, logrando ascender a la máxima categoría del fútbol regional al finalizar esta última campaña, tras quedar campeón de su grupo, eliminar posteriormente al campeón del otro sector, SD Deusto, y, finalmente, deshacerse del último clasificado de la Serie A, el Erandio Club, a doble partido. El Alavés ya se encuentra entre los grandes del fútbol vizcaíno, temporada 1927-28, y va a tener la posibilidad de poder jugar su primer Campeonato de España. Para cumplir este sueño tiene que quedar al final de la liguilla clasificatoria entre los dos primeros, que son las plazas que han otorgado a Vizcaya en 1928. Los rivales son temibles y con experiencia de años participando a gran nivel: Acero Club de Olabeaga, campeón de España de la Serie B en 1924; Athletic Club, 9 veces campeón de España, 10 contando la del Vizcaya, hasta entonces; Arenas Club, una vez campeón de España en 1919 y tres subcampeonatos; y los siempre duros y competitivos Sestao Sport y Barakaldo FC.
Al final de las 10 jornadas que componen la competición, el Deportivo Alavés se encuentra empatado a puntos con el Barakaldo, ambos han sumado doce, por detrás del líder Athletic que ha alcanzado catorce. Entonces no existe el average particular ni general, en ambos vence el Deportivo Alavés, y hay que jugar un partido de desempate para conocer el subcampeón de Vizcaya de la Serie A y el segundo representante vizcaíno. El conjunto albiazul disputa su último partido de la serie el 29 de enero y el Campeonato de España comienza el 5 de febrero. Los clubes se ponen de acuerdo, se fija la fecha del jueves 2 de febrero y como campo neutral San Mamés. Y en La Catedral se doctora el Alavés al vencer con claridad por 5-1 y desarbolar por completo al Barakaldo que juega en inferioridad durante 55 minutos. El sueño se ha cumplido. El Alavés va a participar por vez primera en el Campeonato de España, pero los albiazules van a seguir sorprendiendo.
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“Ya tenemos subcampeón. Va a
representarnos en el Campeonato de España un equipo de nuevo cuño, sorprendente por su serenidad, encomiable por su rápida adaptación a los medios que constituyen la categoría del foot-ball superior”.
San Mamés registra una gran entrada (cerca de 20.000 aficionados). Los socios del Athletic tienen entrada gratis y se recaudan 28.000 pesetas (168 €). El Alavés se lleva, al igual que el Barakaldo, 9.800 pesetas (59 €).