En 2008 se creó la banda de punk rock Delitos Menores, formada por Piña, Iñaki, Óscar y Dela, cuatro amigos a los que los unen dos factores: su trabajo y su pasión por el Deportivo Alavés. "Ninguno de nosotros sabíamos tocar por aquel entonces. Surgió espontáneamente, nos repartimos los instrumentos y hemos ido aprendiendo juntos", recuerdan. Ahora, doce años después y con bastante más experiencia que el primer día, han sacado a la luz Mientras me queden fuerzas, una canción especialmente ilusionante para ellos dedicada al centenario del Glorioso, el club de sus amores y del que son socios.
Aprovechando la ausencia de conciertos debido a la situación de emergencia sanitaria, se reunieron los cuatro en su local y comenzaron a maquinar el tema, dirigido a todo el alavesismo e inspirado en sus experiencias como aficionados. "Por desgracia, este año hemos tenido que suspender los conciertos y eventos que teníamos planeados, no ha quedado otra que parar. Esperemos que lo que no hemos podido hacer en 2020 lo podamos sacar adelante cuando termine todo esto", explican. No son las condiciones idóneas para publicar una canción, pero un club solo cumple 100 años una vez.
Su intención era plasmar en ella el ambiente y las emociones propias de un partido del Alavés, y lo consiguen desde el primer rasgueo de guitarra. Las notas de trompeta y trombón, que corren a manos del grupo madrileño No Konforme, recuerdan al clima festivo y charanguero propio de las previas de los enfrentamientos en Mendizorroza y de las celebraciones de las grandes victorias anteriores a la pandemia, cuando el color azul y blanco teñía la calle Cuchillería horas antes del pitido inicial.
La voz de Piña, acompañada de los coros del resto del grupo, intenta suplir la ausencia del aliento de la afición en la grada, con la que en estos momentos no cuenta el conjunto gasteiztarra. "Yo creo que el Alavés es uno de los equipos de Primera a los que más le está afectando jugar a puerta cerrada. Mendizorroza gana muchos puntos a lo largo de la temporada", argumenta Iñaki, el bajista.
Al final de la canción, parece que el Fondo Polideportivo se funde con las gargantas de los cuatro componentes del grupo para entonar el famoso "Glorioso que nunca falta en los cánticos de la grada de animación. De hecho, ese es uno de los temas principales del sencillo. "Mientras me queden fuerzas, hasta que pierda la voz, yo gritaré ¡Deportivo Alavés!", reza el estribillo. Por fortuna, las cuerdas vocales resisten hasta el final de la canción.
Desde que el grupo publicó el tema el pasado 7 de noviembre en plataformas como Amazon Music o Spotify e hizo accesible el videoclip en Youtube, Mientras me queden fuerzas ha tenido una muy buena acogida, posiblemente mejor de lo que Piña, Iñaki, Dela y Óscar imaginaron. "Teníamos miedo de que la gente nos criticara o dijera que es solo ruido, no es la clase de música que se escucha ahora. Pero ha gustado a alavesistas de todas las edades", afirman.
A día de hoy, el vídeo de Youtube ha superado las 10.000 reproducciones, y eso que no han pasado ni dos semanas completas desde que salió a la luz. "Desde que la liberamos y la compartimos, ha ido difundiéndose muy rápido por Whatsapp y redes sociales y nos han llegado mensajes muy positivos. Nuestra intención era que llegara al alavesismo y lo hemos conseguido", celebra Piña.
El videoclip está grabado al aire libre, cerca del local en el que ensayan y con la batería sobre el césped. Podría parecer que se grabó en condiciones idóneas, pero nada más lejos de la realidad. "Quedamos para grabarlo poco antes de que limitaran el número de personas permitidas en las reuniones y empezó a llover. Estuvimos a punto de dejarlo para otro día, pero en cuanto paró salimos y lo grabamos. Acabamos llenos de barro", admiten.
El sol tampoco ayudó y en el momento de editar el vídeo, algo que hicieron ellos mismos, tuvieron que jugar mucho con el brillo para equilibrar las escenas más soleadas con las más oscuras. "Lo mejor de tener que esperar por la lluvia es que al final aprovechamos la oscuridad para grabar con las bengalas y quedó muy bien". Así termina el vídeo, con el color azul del Glorioso rodeando a todo el grupo, al igual que tiñe las calles en las grandes citas. Algunas de ellas las rememoran en el propio videoclip, que hace continuos guiños a los goles y momentos más destacados de los cien años de historia albiazul.
El sencillo arranca con la frase "hoy vuelvo a echar la vista atrás; cien años de historia, recuerdos en mi memoria". No son pocos los recuerdos de los cuatro músicos relacionados con el Alavés, ya que todos ellos son socios de la entidad albiazul. Algunos de ellos, de hecho, son compartidos. "Óscar y yo estábamos en una despedida de soltero en Gijón el día que el Alavés se jugaba la permanencia contra el Jaén, en 2014. Pedimos un paréntesis de dos horas y nos sentamos en la Plaza de España a ver el partido con el móvil, cuando todos los demás estaban pendientes del partido del Sporting. Cuando marcó Guzmán lo celebramos como locos", cuenta Iñaki.
Si en algo coinciden los cuatro, eso sí, es en que uno de sus peores recuerdos es la época de Dmitri Piterman como presidente del club. Para Óscar, el descenso a Segunda División B fue también un mazazo, aunque vivió buenos momentos en los viajes en la división de bronce. "Entonces íbamos solo 4.000 en Mendizorroza. Es una alegría que ahora se llenen las gradas del estadio. Cuando éramos críos, en el colegio todos eran del Barça, del Madrid, del Athletic y de la Real, ahora se ven muchos más niños del Alavés", comenta el batería.
Dela, por su parte, destaca el paso de eliminatorias hasta llegar a la final de la Copa de la UEFA en 2001, aunque lamenta no haber podido disfrutar de aquella final. "Esa vez, tocó quedarse en casa. Fue muy ilusionante ver como el Alavés iba pasando de ronda, paso a paso. En casa no conseguíamos ganar, pero luego sellábamos la clasificación lejos de Vitoria", rememora. Piña, por otro lado, admite que los malos momentos prefiere olvidarlos, pero sí se acuerda de momentos más gratificantes, como la victoria del Glorioso en el Camp Nou por 1-2 justo después de ascender a Primera o una visita a Ipurua en la que Téllez fue dando la mano uno por uno a todos los aficionados del Alavés.
Irónicamente, en un momento de la canción se dice "las gradas ya están llenas", algo que suena ya casi nostálgico. "Nosotros nos inspiramos en el fútbol que conocemos todos, el de los buenos momentos junto al resto de la afición", explican. Para ellos, está siendo muy duro pasar tanto tiempo sin poder asistir a Mendizorroza, aunque lo que echan realmente de menos es "el ambiente de las previas y los momentos posteriores a los partidos, el momento en el que te juntas con los amigos para tomar algo". Cuando los bares estaban abiertos, todavía podían juntarse "unos pocos para ver el partido juntos", pero ahora no queda más remedio que verlo desde el sofá de casa.
Lamentablemente, la situación de emergencia sanitaria también impide que Delitos Menores pueda tocar en directo su canción, pero esperan poder hacerlo más adelante. Ellos han enviado el sencillo al club, pero no han obtenido respuesta. "Sería un sueño poder hacer una colaboración con el Alavés, pero no era esa nuestra intención, queríamos llegar al alavesismo. Sabemos que le ha llegado, ojalá suene por lo menos en el descanso de algún partido", cuenta Piña. Quizá no lo logren, pero lo que de momento sí han conseguido es que el alavesismo vuelva a animarse a cantar el ¡Glorioso alé!
El videoclip de la canción, editado por ellos, ha alcanzado más de 10.000 visualizaciones en Youtube en menos de dos semanas
El sencillo alude a momentos históricos del club y mezcla el punk rock con un toque charanguero que recuerda al ambiente de las previas
"El Alavés es uno de los equipos de Primera a los que más les afecta jugar sin su hinchada"
Bajista de Delitos Menores
"La peor época fue la de Piterman, y uno de los mejores recuerdos, el año de la final de UEFA"
Guitarrista de Delitos Menores
"Lo que más se echa en falta no es tanto ir al campo como todo lo que rodea al partido"
Batería de Delitos Menores
"Sería un sueño que nos llamara el Alavés, pero nuestro objetivo era llegar a los aficionados"
Vocal y guitarrista de Delitos Menores