vitoria. El encuentro que el pasado sábado disputó el Deportivo Alavés se ha convertido en un inesperado punto negro dentro de la trayectoria del equipo en el presente curso. No tanto por la clara derrota encajada -que es casi lo de menos en estos momentos- como por la mala imagen ofrecida durante los noventa minutos. El Glorioso estuvo irreconocicle sobre el césped de Santo Domingo y esa pérdida de identidad es lo que más preocupa. Por todo ello, parece que lo acontecido en esta séptima jornada liguera va a tener consecuencias de manera inmediata. Especialmente en la retaguardia donde, a tenor de lo que se pudo observar ayer, podrían producirse movimientos.
Natxo González parece decidido a no dejar pasar por alto este accidente y medita apostar por alternativas en la próxima cita del conjunto vitoriano, el domingo ante el también muy necesitado Hércules de Alicante. Curiosamente, el pasado fin de semana también fue la zaga la línea en la que el preparador alavés, al postar por primera vez de inicio desde que arrancó la competición por formar con tres centrales. Como quedó claro casi desde el pitido inicial, el experimento no funcionó en absoluto y todo apunta a que el siguiente movimiento será dar marcha atrás para recuperar lo que había funcionado hasta entonces.
En cualquier caso, no parece que vaya a ser únicamente el sistema lo que decida cambiar el entrenador albiazul. Además de ello, también surgen en el horizonte variaciones de los nombres propios escogidos para formar parte del once titular. En concreto los de Pepe Mora y Nano son los que se perfilan como principales candidatos a actuar desde el inico en el importante compromiso del próximo fin de semana.
Al menos eso es lo que puede desprenderse del entrenamiento de ayer en el que, aunque no se disputó un partidillo propiamente dicho, Natxo González sí ordenó varios ejercicios en los que formó dos defensas y en todos ellos ambos jugadores integraron la teóricamente titular junto a Óscar Rubio y Luciano.
En consecuencia, los damnificados si finalmente se confirman estos movimientos ensayados ayer serían Alex Ortiz y Manu García (también Jarosik se caería del once aunque, en su caso, su presencia en el mismo no estaba teniendo la misma continuidad al estrenarse como titular ese día). Ambos estuvieron bastante desafortunados en el encuentro del pasado sábado frente al Alcorcón aunque es cierto que prácticamente todo el equipo ofreció el mismo pobre nivel.
Vuelta a la idea original La vuelta de Pepe Mora al eje de la zaga podría considerarse lógica por cuanto el veterano defensor castellonense arrancó el curso como titular y únicamente una lesión tras disputar los tres primeros compromisos junto a Luciano le apartó de los onces iniciales dando paso a Ortiz. Supondría, por lo tanto, un regreso a la idea inicial una vez que ya lleva varias semanas entrenando con absoluta normalidad con el grupo. Además, el hecho de que el próximo visitante de Mendizorroza sea el equipo en el que ha militado los últimos ejercicios añade un plus de motivación que probablemente Natxo González no querrá desaprovechar.
Por lo que respecta al caso de Nano, sí podría considerarse una sorpresa de cierta consideración su presencia en el lateral zurdo. Hasta el momento Manu García ha sido el dueño absoluto de esa demarcación -sólo se ha perdido el duelo de la primera jornada por sanción y le suplió Unai Medina- y además los problemas físicos han perseguido al gallego. Tras lesionarse en la pretemporada, volvió a romperse en la eliminatoria de Copa ante el Zaragoza, cuando Natxo González le abrió la puerta de la titularidad. Han sido sus únicos minutos oficiales hasta la fecha. Si el técnico albiazul confirma finalmente estos planes, habrá que ver si la inclusión de Nano en el once titular supone el paso de Manu García al banquillo o, por el contrario, que el vitoriano adelante su posición en la banda izquierda para ejercer de interior.