Vitoria. Rebelión a bordo. En un nuevo paso en la escalada de aislamiento en la que está inmerso Alfredo Ruiz de Gauna en los últimos tiempos, ayer fue el turno de los profesionales del primer equipo albiazul. Los futbolistas y el cuerpo técnico al completo -incluido el director deportivo Gorka Etxeberria- se amotinaron públicamente contra el todavía presidente del club y en un duro comunicado público le instaron a tomar el camino hacia la puerta de salida lo antes posible. El divorcio por lo que parecen diferencias irreconciliables se antoja absolutamente definitivo.
La película de los acontecimientos arrancó a primera hora de la mañana, cuando se dio luz verde final a unas actuaciones que, como ya apuntó este periódico el pasado martes, llevaban varios días cocinándose. De esta manera, aprovechando que el entrenamiento estaba fijado para la tarde, se convocó una reunión de urgencia de los implicados en la que se presentó el borrador del comunicado que posteriormente harían público y que fue rubricado por todos ellos. Inmediatamente después, se produjo la citación para una rueda de prensa que tendría lugar a las doce del mediodía. Mientras tanto, todos estos movimientos se desconocían en el club.
La comparecencia pública de los treinta y tres firmantes del documento resultó breve. Sentados a la mesa, Igor Cuesta, Ander Alaña, Geni y Asier Salcedo, los cuatro capitanes. Detrás, el resto de la plantilla, el cuerpo técnico integrado por Miguel Ángel Álvarez Tomé, Iñaki Ocenda, Alfonso Subero, Tito, Rafa Cristóbal y los dos fisios y los miembros de la dirección deportiva Gorka Etxeberria, Ibon Zoilo y Edu Carrera.
El nueve albiazul fue el único que tomó la palabra para leer un comunicado que advirtió que se había redactado con "espíritu constructivo" y que, a partir de ese momento, sería "aparcado" para centrarse en "lo deportivo". Pese a la concisión del mesaje, su contundencia no admite dudas. Los profesionales de la primera plantilla han tomado partido y no precisamente al lado del actual consejo de administración. Para empezar, argumentan en "la falta de seriedad en la gestión y las continuas promesas incumplidas, tanto a nosotros como a todos los estamentos del club" los motivos de que se les haya acabado "la confianza en la familia Ruiz de Gauna".
Por todo ello, no dudan en reclamar un inmediato cambio de poderes en las oficinas del Paseo de Cervantes. "Le pedimos que no sea un impedimento y facilite la entrada del único grupo inversor que públicamente ha mostrado su interés para que la normalidad regrese al club cuanto antes". En esta misma línea, agradecen a Saski Baskonia "la apuesta realizada para salvar al Deportivo Alavés" y animan a que "mantenga viva su oferta". No obstante, también lanzan una advertencia. "Sabemos que el 17 de mayo puede marcar definitivamente el futuro de un club casi centenario, por lo que pedimos una rápida solución dada la gravedad de la situación y para centrarnos única y exclusivamente en el aspecto deportivo", significaron.
Por último, la plantilla albiazul quiso resaltar el trabajo "vital" de las instituciones y les animan a que continúen trabajando en la misma dirección para que "podamos ver la luz al final del túnel" y culminen de forma positiva todas las negociaciones pendientes, "especialmente con Caja Vital".
Como colofón, los jugadores hicieron un llamamiento a la afición, a la que solicitaron que "nos apoye para lograr el objetivo que todos deseamos: el ascenso. Que nadie dude que daremos todo lo que llevamos dentro para lograr el objetivo final". Suceda lo que suceda sobre el terreno de juego en las próximas semanas, lo que resulta evidente ahora mismo es que el consejo de administración se ha quedado solo y la relación con sus profesionales será, cuando menos, complicada.