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Continúa la lucha por la igualdad

Al desafiar las normas tradicionales, los hombres pueden contribuir a crear un entorno más equitativo

Continúa la lucha por la igualdadDNA

¿Los hombres cuestionan la masculinidad tradicional? La respuesta es sí. El cuestionamiento de la masculinidad es un proceso importante que puede llevar a una mayor comprensión personal y social.

Al desafiar las normas tradicionales, los hombres pueden contribuir a crear un entorno más equitativo donde todos tengan la libertad de expresarse sin estar limitados por estereotipos rígidos.

El 43,2% de los hombres vascos rechaza claramente los mandatos de la masculinidad tradicional y adopta modelos igualitarios

Así, la mayoría de los hombres alaveses y vascos cuestiona la masculinidad tradicional, aunque más de la mitad sigue sin adoptar modelos igualitarios.

Además, los chicos jóvenes, más expuestos a los mensajes contrarios a la igualdad del espacio digital, están más alineados con los estereotipos conservadores.

La mayoría de los hombres alaveses y vascos cuestiona la masculinidad tradicional

Estas son solo una de las conclusiones principales del estudio La caja de la masculinidad en la CAE en el que se analiza el impacto de las masculinidades en la población vasca y que recientemente se ha presentado en la jornada Estrategias para el trabajo con hombres y masculinidades por la igualdad en Euskadi organizada por elInstituto Vasco de la Mujer Emakunde.

Manifestación con motivo del 8M. Pie de foto. | FOTO: DNA

En el encuentro, en el que se han presentado las líneas de trabajo que se van a desarrollar en los próximos años en el marco de la Estrategia 2030 Gizonduz, se ha realizado una valoración de la trayectoria recorrida y se han presentado los datos del informe La caja de la masculinidad en el País Vasco.

Construcción, actitudes e impacto de las masculinidades en la población vasca, encargado por Emakunde al Centro Reina Sofia FAD Juventud.

Manifestación por el Día de la Mujer. | FOTO: FERMÍN PÉREZ

Una de las principales conclusiones de este estudio es que el 43,2% de los hombres vascos rechaza claramente los mandatos de la masculinidad tradicional y adopta modelos igualitarios, y solo el 7% exalta de forma exacerbada la hombría y los mandatos de género tradicionales, es decir, se sitúa dentro de la ‘caja de la masculinidad’.

El resto, prácticamente la mitad, 49,8% ocupa una posición intermedia, y aunque se muestran de acuerdo con los mandatos tradicionales, tampoco incorporan una masculinidad igualitaria por completo.

Distintos niveles

La caja de la masculinidad representa el grado de adhesión a los estereotipos más tradicionales de género.

Estar dentro significa ajustarse a normas rígidas que dictan cómo debe ser y comportarse un hombre; estar fuera implica rechazar estos modelos y adoptar una visión más flexible e igualitaria de la masculinidad; estar en el borde es una posición intermedia, en la que se cuestionan ciertos mandatos, pero sin llegar a romper completamente con ellos.

Entre estos últimos se encuentran consignas como la prohibición de mostrar vulnerabilidad, la heterosexualidad como norma o la idea de que un hombre de verdad no debe pedir ayuda ni mostrar actitudes percibidas como afeminadas.

Edad, variable crucial

La edad es una variable crucial en esta cuestión y, de hecho, los hombres más jóvenes, especialmente aquellos de entre 15 y 19 años, son los que muestran una mayor inclinación hacia los estereotipos de la masculinidad tradicional, en contraposición con los hombres de más edad.

El porcentaje de adolescentes alineados con la masculinidad hegemónica tradicional es de un 22,5%, un fenómeno que se explica por la proliferación de narrativas misóginas en el ecosistema digital.

En lo que se refiere a la relación entre masculinidad y violencia de género, a pesar de que el 80% de la población vasca afirma que es un problema social muy grave, (88% ellas y 72,6% ellos), para quienes se encuentran dentro de la caja de la masculinidad el panorama es distinto.

Entre este grupo la mayoría considera que la violencia de género es un invento ideológico. El estudio implica a toda la sociedad vasca y en el caso de las mujeres se concluye que solo el 2% se sitúa dentro de la caja de masculinidad, distanciándose en mayor medida de los estereotipos de género.

En la jornada se presentó también La estrategia Gizonduz 2030 y la evaluación del programa que cumple ya 18 años.