Los cuatro jóvenes acusados de ser los presuntos asesinos de un repartidor en Logroño en la noche del 6 de abril de 2021, al que dejaron inconsciente y que fue hallado ocho horas después en coma y con síntomas de hipotermia, han reconocido este lunes los hechos y han pedido perdón a la familia.

Así lo han afirmado durante el juicio con jurado que ha comenzado en la Audiencia Provincial de Logroño, que se prolongará durante algunos días, aunque las partes han alcanzado un acuerdo sobre la pena, que no se ha hecha pública.

El fiscal pedía inicialmente 30 años de prisión para cada uno de los acusados y que abonaran a la familia del fallecido 300.000 euros y algo más de 6.000 al Servicio Riojano de Salud, cantidades que ya están satisfechas.

Los hechos se produjeron en el parque del Ebro, donde los cuatro acusados, junto a dos chicas menores, abordaron a otro joven, quien estaba en estado de embriaguez y residía en el cercano municipio alavés de Oion, con el objetivo de robarle una bicicleta y otras pertenencias.

Dieron una paliza a la víctima, la dejaron viva e inconsciente en el parque, del que se fueron mientras se jactaban y recreaban lo que habían hecho, como grabaron unas cámaras de seguridad.

La víctima no fue hallada hasta ocho horas después por un hombre que paseaba por la zona, por lo que sufrió síntomas de hipotermia y falleció luego en el hospital.

La hermana no cree en el arrepentimiento

Las respuestas de los cuatro acusados, que están en prisión desde su detención, han sido similares: llevaban bastante tiempo de fiesta en el parque del Ebro y consumieron alcohol en gran cantidad y drogas, a las que eran habituales.

Han coincidido en que participaron en la agresión, han manifestado su arrepentimiento y han pedido perdón a la familia de la víctima, que estaba presente en la sala.

Tras la sesión judicial, la hermana del fallecido ha explicado a los periodistas que no cree en el arrepentimiento de los acusados y que considera que solo es una estrategia.

"Estoy arrepentido desde el primer momento, no tenía ninguna intención de hacer eso", ha subrayado uno de los acusados; mientras que otro, con una discapacidad cognitiva reconocida, ha admitido que "salió mal" el atraco a este joven y "me arrepiento todos los días de lo que pasó".

Dejar a la víctima a la intemperie

El fiscal ha recordado que uno de los acusados dio un puñetazo en la cabeza a la víctima y los demás le propinaron patadas y golpes por todas las partes del cuerpo, incluso después de que quedara inconsciente.

Le robaron la bicicleta y la cazadora, que se puso uno de los acusados, y abandonaron el parque "en actitud jocosa" en dirección al casco antiguo, donde una patrulla policial les identificó por incumplir el confinamiento por la covid-19, aunque no fueron detenidos por los hechos que se juzgan hasta el 9 de abril.

El fiscal ha incidido en que abandonar al joven en el parque tuvo consecuencias fatales porque fue encontrado ocho horas después con hipotermia y en coma; y, aunque fue reanimado en la ambulancia, murió en el hospital en la tarde del 7 de abril.

El abogado de la familia de la víctima ha subrayado que el consumo de sustancias "puede explicar de forma parcial los hechos, pero no los justifica"; y ha lamentado "la mala suerte" que tuvo al "cruzarse con alguien que trató de robar a una persona desvalida e indefensa y luego la dejaron agonizando".