El fin de las vacaciones de verano puede ser un momento desafiante para aquellos que han experimentado una ruptura de pareja. Las vacaciones pueden ser un catalizador para tomar la decisión de no continuar con una relación, así que, al acabar el verano, el regreso a la rutina puede aumentar la sensación de pérdida y dolor emocional. En muchas ocasiones disponemos de las herramientas emocionales necesarias que nos ayudarán a hacer esa transición. Pero, tanto si se trataba de una relación larga o si solo ha sido cuestión de unos meses, desde La Fundación Laboral San Prudencio queremos aportar 10 pautas que podrían ayudarte a superar activamente un duelo por ruptura de pareja después de las vacaciones de verano.

Permítete sentir

Evita la tentación de pretender que la ruptura no te afecta realmente, de huir hacia delante. Nos cargamos de trabajo, de actividades, o sin más procuramos no pensar –o no sentir—y dejar que la rutina nos lleve. Sin embargo, el primer paso en el duelo tras una ruptura de pareja es permitirte experimentar y expresar tus emociones. Puedes sentir tristeza, enojo, confusión y negación. Esas emociones son parte de las fases del duelo y es importante aceptarlas sin juzgar. Busca formas de expresar lo que sientes de manera saludable y natural, si necesitas llorar, llorando.

Busca apoyo emocional

No tienes por qué enfrentarte al duelo en soledad. Habla con tus amistades cercanas o familiares. Compartir tus sentimientos y experiencias con alguien que te escuche, sin juzgarte, y comprenda tu dolor, puede brindarte consuelo y perspectiva. Tómate tu tiempo, no quieras pasar la página de un día a otro, cada uno necesitamos un tiempo diferente. Las emociones no siguen un manual ni una lógica. Si pasados los primeros meses tras la ruptura, esas emociones te siguen desbordando o se alargan en el tiempo, puedes buscar la ayuda de un profesional para que te oriente y acompañe en este proceso.

Establece límites saludables

Establece límites claros con tu expareja para permitirte enfocarte en tu propio proceso de elaboración del duelo. ¿A qué nos referimos con esto? Evita el contacto constante con tu ex y no te enganches en patrones destructivos o negativos –como una dependencia emocional. Especialmente si la ruptura no ha sido de mutuo acuerdo, es necesario darle espacio a la separación y concentrarte en ti mismo o en ti misma. Si compartes responsabilidades (hijos, por ejemplo), procura mantener una comunicación respetuosa y asertiva, manteniendo las interacciones a lo estrictamente necesario. Mínima comunicación y máxima cordialidad.

Cuida de ti mismo

Volver a encontrar un equilibrio emocional después de una ruptura se consigue dedicándote tiempo y esfuerzo en cuidarte a ti mismo. Prioriza tu bienestar físico y mental. Cuida lo que comes, duerme lo suficiente y realiza una actividad física regular. Y también busca algo que te divierta, puede ser una afición –como leer, escuchar música, el teatro, o viajar— o una actividad física en grupo (senderismo, por ejemplo). Date el gusto, pequeños placeres y caprichos que te puedas permitir y te complacen.

Un hombre sonriendo y corriendo por un bosque Banco de imágenes

Aprende y sigue adelante

Una ruptura es un proceso complejo y no necesariamente refleja un error o fallo personal. No cargues con la culpa innecesaria. Recuerda: una relación es responsabilidad de ambas partes. Es normal tratar de buscar una explicación a lo sucedido y, mientras esa actitud es sana, no debemos obsesionarnos con ello. Si has cometido errores, busca cómo mejorar de cara a futuro. Piensa y escribe sobre lo que has aprendido para una relación en el futuro. Pon por escrito todo lo que quieres mantener de tu forma de estar y de hacer en una relación de pareja, lo que depende de ti y no quieres que cambie. Si fuera necesario, puedes contar con la ayuda de un terapeuta.

Evita el victimismo

No permitas que una ruptura sentimental defina tu vida. No lo centres todo en eso que ha pasado. Deja el pasado en el pasado. Si bien, en ocasiones, hay motivos y situaciones que te puede hacer sentir como víctima, tu vida es mucho más que una situación en particular. Quien te altera te controla. Recuerda: el victimismo es una forma de manipulación emocional.

Establece metas y crea una nueva rutina

Tras una ruptura, puede ser beneficioso ponerte metas y crear una nueva rutina. No se trata de romper con todo y cambiar radicalmente, sino de ponerte pequeños objetivos realistas que te permitan avanzar hacia la recuperación. Esto podría incluir actividades como retomar un hobby, aprender algo nuevo o participar en actividades comunitarias, o recuperar tus actividades o tus relaciones que fuiste dejando porque a tu pareja no le interesaban. Establecer una rutina diaria saludable te dará una estructura y te ayudará a reducir la sensación de vacío emocional.

Acepta la pérdida

Reconocer que la relación ha terminado, te permitirá que la tristeza y el dolor se procesen gradualmente. Aceptar la pérdida es un paso fundamental para avanzar hacia la resolución del duelo. No se trata de negar lo que sientes sino de aceptar que tu vida ha tomado un nuevo rumbo. Las personas que sufran dependencia emocional tienen más dificultades para asumir que la relación se ha terminado. Si te cuesta dar este paso, no dudes en acudir a un profesional.

Amplia tu círculo social

Puedes sentir la tentación de aislarte con motivo de la ruptura, especialmente al principio cuando necesitamos desahogarnos emocionalmente. Y aunque puede ser necesario, es recomendable salir y socializar, aunque no apetezca al principio. Vete ampliando tu círculo social. Sal con tus amistades más cercanas, con familiares que te apoyen y con los que puedas hablar o no hablar, según tú necesites, personas de tu círculo de seguridad. Especialmente si compartías amistades con tu ex. Poco a poco vete abriendo puertas a nuevas amistades y nuevas posibilidades.

Grupo de amigos sonriendo y comiendo en un restaurante Banco de imágenes

Pide ayuda si lo necesitas

Las rupturas después el verano son bastante comunes. No serás la primera persona ni la última que ha tenido una ruptura emocional. Pero si notas que las emociones te siguen desbordando, que necesitas mantener un contacto constante con tu ex pese a ser negativo, o que han pasado meses y parece que te has quedado atascado, quizá sea el momento de plantearte buscar ayuda profesional.

Superar el duelo después de una ruptura de pareja puede ser un proceso doloroso, pero es importante recordar que es posible reconstruir tu vida y encontrar el bienestar emocional nuevamente. Al permitirte sentir y expresar tus emociones, establecer límites saludables, buscar apoyo emocional y cuidar de ti mismo, podrás avanzar hacia el afrontamiento del miedo y la adaptación a una nueva etapa de tu vida. Recuerda que cada uno tenemos nuestros propios ritmos para sanar, y ser amable contigo mismo es esencial en este proceso. Tómate tu tiempo, el que tú necesites para elaborar activamente tu dolor.

Más información

Si quiere saber más sobre PsicoLan, puede ponerse en contacto con La Fundación San Prudencio en www.lafundacion.com o en el teléfono 945 222 900.