El Ayuntamiento de Llodio ha lanzado este mes el esperado concurso para hacerse con la empresa que diseñe, suministre y monte el nuevo parque infantil del Parque Lamuza, que sustituirá a la obsoleta área de juegos ubicada en las inmediaciones del edificio El Casino. Una actuación para la que se ha reservado, en el Presupuesto municipal de este año, un gasto de 144.228,00 euros más 30.287,88 euros del 21% de IVA, que totalizan 174.515,88 euros. Las empresas interesadas en este contrato tienen de plazo hasta el 19 de julio para presentar sus ofertas. Estas se abrirán el 22 de julio y, una vez adjudicada la obra, la adjudicataria dispondrá de 17 semanas para hacer entrega de la instalación. Algo que implica, de ir todo sin contratiempos, que la población podrá disfrutar de esta nueva área de juegos infantil para finales de este año o primeras semanas de 2023.

En base a la memoria del proyecto lo que se busca es sustituir el área de juegos actual, con una superficie de 285 metros cuadrados donde se emplazan cinco juegos, principalmente de estructura de madera, por otra de una superficie mínima aproximada de 1.200 metros cuadrados, en la que se asentarán cinco áreas para diferente uso, tipología de juegos y pavimentación diferenciada, en los que la madera deberá prevalecer como material principal en la construcción de todos los elementos y estructuras, de cara a mimetizarse con el entorno natural del enclave.

En concreto, la zona uno, de entorno a 140 metros cuadrados, será el área de acceso en la que se deja abierta la posibilidad de formar bancadas en pequeños niveles que sirvan como asiento para descanso. Lo que sí deberá englobar es juegos integradores en donde niños de diferentes capacidades puedan jugar juntos (juegos de arena y agua), en un espacio que deberá ser accesible mediante caminos de madera y suelos de absorción de impactos aptos para sillas de ruedas.

Columpios y tobogán

La zona dos, de otros 150 metros cuadrados, irá destinada a columpios para menores de uno a diez años; y la zona tres, con una superficie mínima de 280 metros cuadrados, a instalar aparatos oscilantes y de movimiento, tales como columpios para edades de entre 8 y 14 años o pasarelas de cinta de goma armada, tipo puente elástico. Por su parte, la zona cuatro estará dedicada únicamente a una tirolina o funicular, de 40 metros y doble, para que durante el uso sea posible crear rivalidad y un ligero toque de competición; y la cinco, aprovechando la zona de ladera existente, sus pendientes y los árboles, se pretende que sea un circuito de obstáculos, equilibrios, pasos con cuerdas, pasarelas, cintas suspendidas, elementos de escalada y deslizantes, toboganes o puentes colgantes, entre otros, todos ellos con caídas inferiores a un metro “para no tener que disponer de pavimentación de seguridad, pretendiendo que la mayor parte de la superficie sea de hierba”, reza la memoria.

De igual forma, en los dos extremos del recorrido, e incluso en algún punto central, se deberán disponer puntos de reunión aprovechando si es posible los árboles existentes, abrazando a ellos pequeñas estructuras con barandillas de protección a modo de casitas, que sirvan de embarque y desembarque del circuito. Este circuito se rematará con una estructura con plataforma que sirva de entrada y punto de bajada por un tobogán cerrado de acero inoxidable que desembarque en las áreas de juego inferiores. “Con todo ello, se pretende aportar un juego que obligue a recorrer una serie de obstáculos que finalmente puedan terminar en un descenso por el tobogán cerrado, además de otras alternativas lúdicas de ascenso y descenso”.

Respeto al entorno

Previo al inicio de los trabajos, se deberá vallar todo el recinto de la obra, para después proceder a desmontar por completo la actual área de juegos y su pavimento de grava, y dar inicio la obra de cimentación, explanación o creación de taludes que requiera el montaje de las nuevas estructuras. Las especies arbóreas existentes en la zona deberán respetarse y protegerse adecuadamente durante la misma para minimizar cualquier afección; y las zonas verdes existentes afectadas por las actuaciones de montaje, deberán ser objeto de mejora y adecuación aportando tierras vegetales en cuantía suficiente, realizando un laboreo, abonado y siembra de césped en un ámbito suficiente, así como el mantenimiento, siega y riego durante los dos primeros meses.

La renovación del parque infantil de Lamuza –una de las 27 áreas de juegos infantiles que tiene Llodio, incluidas las de los centros públicos de enseñanza– se enmarca en el plan de mejora de los equipamientos lúdico deportivos que tiene entre manos el Ayuntamiento, dado que se encuentra “en una situación de obsolescencia” y enclavada en una zona que a corto plazo será más concurrida incluso que en la actualidad.