- Una tesis doctoral desarrollada en la Universidad de La Rioja plantea la viticultura digital -a través de técnicas de visión artificial, aprendizaje profundo y automático- como alternativa a los métodos tradicionales para estimar los componentes del rendimiento de la vid, de forma no invasiva, en condiciones de campo, usando como datos imágenes RGB de la vid adquiridas en continuo mediante una plataforma móvil. Estos componentes sirven de indicadores del rendimiento final entre dos meses y 100 días antes de la vendimia.
Desarrollada en el Departamento de Agricultura y Alimentación, en el marco del programa Doctorado en Enología, Viticultura y Sostenibilidad, ha demostrado que frente a los métodos tradicionales para prever resultados, la visión e inteligencia artificiales ofrecen una alternativa que requiere menos tiempo y que permite procesar más datos.
El investigador Fernando Palacios ha desarrollado un algoritmo de visión artificial para extraer las características morfológicas de los racimos, y un modelo de aprendizaje automático para evaluar su compacidad en condiciones de campo, demostrando ser una alternativa más objetiva que la evaluación visual tradicional.
En segundo lugar, ha abordado la cuantificación del número de flores de la vid por cepa. El algoritmo desarrollado (basado en aprendizaje profundo) permite, tras una segmentación semántica individual de cada flor, obtener un indicador de rendimiento cerca de 100 días antes de la vendimia.
En definitiva, la combinación de la visión artificial, el aprendizaje profundo y el aprendizaje automático ha permitido cuantificar el número de bayas de la vid en tamaño guisante por cepa, superando parcialmente los problemas de oclusión de las bayas. El estudio demuestra cómo esta herramienta podría ser muy beneficiosa para desarrollar un indicador de rendimiento casi dos meses antes de la vendimia sin aplicar una defoliación completa intensiva de las cepas.
El modelo de estimación ha demostrado ser preciso a la hora de estimar el rendimiento en cepas de cabernet sauvignon, malvasía, moscatel, syrah, tempranillo y verdejo, no solo cuando estas variedades de vid estaban ya incluidas en el modelo, sino también cuando eran previamente desconocidas para el mismo.