La Asociación SOS Ostalaritza ha condenado este viernes en la plaza de la Virgen Blanca las actuaciones policiales durante la reapertura de la hosteleria en Vitoria.
Carlos Sobrón, en nombre de la asociación, ha mostrado “su enorme preocupación” tras la “desproporcionada” actuación del cuerpo policial vitoriano, en relación con su “trato a los profesionales de la hostelería y a su clientela “las pasadas semanas”.
La reapertura de la hostelería en el País Vasco tras la decisión del TSJPV “no gustó al ejecutivo de Urkullu”, ha comentado Sobrón, y ha añadido que “ha vuelto a cargar de forma velada” contra el sector hostelero, que ha derivado en un “aumento de la presión policial”.
“Se puede entender que haya cierto control para que se respeten las medidas sanitarias, pero, de ninguna manera, que se realice acechando y atosigando a clientes y trabajadores, movilizando despliegues completamente desmesurados”, ha añadido el representante de la asociación.
Sobrón, durante la comparecencia, ha estado acompañado de Javier Cabrera, el hostelero con orden de desahucio para el próximo 16 de marzo, y Saturnino Perea, el dueño del Iguana Café detenido hace dos semanas. Este último, acusado de atentar contra la autoridad, ha explicado que sigue “sin entender” la situación, y ha explicado que “muchas veces, no solo el otro día” los hosteleros sufren “acosos desproporcionados” por parte de la policía.
Cabrera, por su parte, tras la postergación de el desahucio de su vivienda en el último mínuto el pasado martes 23, ha explicado que se encuentra “a la espera de que alguien pueda echar una mano, sobre todo las instituciones”. Además, ha reiterado que las instituciones tampoco “se han puesto en contacto en ningún momento” con la familia.
“La gente tiene un poco más interiorizada la situación que vivimos, estamos en todo momento realizando una función normativa”, ha comentado Sobrón. Del mismo modo, ha expresado su desacuerdo tras la decisión del Gobierno Vasco de retrasar las ayudas al sector durante 3 meses, lo que ha puesto “más difícil aún la supervivencia de muchos locales y puestos de trabajo”.
"Sin ayuda estamos muertos"
Tras la rueda de prensa, la asociación ha convocado una concentración frente a la sede del PNV en la calle Postas de la capital alavesa. Al grito de Laguntzarik gabe, hildak gaude (Sin ayuda estamos muertos)Laguntzarik gabe, hildak gaude, decenas de personas han mostrado su apoyo al sector hostelero, que se encuentra en la cuerda floja mientras se encuentra a la espera de una respuesta por parte del Gobierno Vasco.