- La segunda licitación para adjudicar el contrato de limpieza viaria y recogida de basuras en la capital alavesa para los próximos cuatro años vuelve a despertar el interés de los mismos actores que en el anterior concurso abortado por los técnicos municipales hace diez meses. Después de un fallido primer intento por abrir las plicas de las empresas aspirantes, el pasado 4 de agosto debido a una impugnación, en la jornada de ayer el máximo órgano de contratación municipal puso nombre a la identidad de las tres firmas que pretenden gestionar el contrato más jugoso de cuantos salen a concurso y que supone a las arcas municipales un desembolso de 26,8 millones de euros al año. Como se esperaba, bajo la fórmula de la unión temporal de empresas (UTE), en la parrilla de salida se sitúan Cespa-Onaindia, Urbaser-Enviser y VTR S.A., que aúna a FCC, Valoriza y Balgorza. La composición de esta terna es una de las novedades con respecto al proceso anulado por los técnicos municipales en noviembre del pasado año, alegando incumplimientos de las condiciones requeridas en los pliegos. La multinacional FCC, actual prestataria del servicio junto a GMSM, vuelve a presentarse en compañía de Valoriza y añade ahora a una firma alavesa como Balgorza, a quien avala una larga trayectoria en el sector de la obra pública y construcción del territorio.

Se abre ahora el turno de los técnicos municipales para que sometan a estudio y revisión los voluminosos armarios de documentación que cada empresa entregó el pasado 3 de agosto al concluir el periodo de presentación de ofertas al concurso. El precio global del contrato es de 107,42 millones de euros, IVA incluido, para los cuatro años de vigencia y la posible prórroga de un quinto ejercicio. El pliego de condiciones estipula que ninguna de las tres ofertas presentadas podrá estar por debajo del 9% del presupuesto de licitación, IVA incluido, lo que conllevaría a considerarla como una propuesta desproporcionada o anormal. A partir del precio que cada una de ellas ha estimado que está en condiciones de llevar a cabo el extenso capítulo de servicios de limpieza viaria y recogida de basuras, se aplica una fórmula matemática para determinar una puntuación que la convierta en la mejor oferta en relación calidad-precio. Será a la vista de este minucioso informe cuando se pueda determinar la identidad de la UTE que ha presentado la mejor oferta y, como sucede en cualquier concurso, se le adjudique la prestación del servicio.

La unidad de Gestión de Residuos va a ser la encargada de redactar ese documento teniendo en cuenta una serie de hasta 17 criterios materiales de adjudicación mediante un juicio de valor y un total de 100 puntos. Ahí se valorarán cuestiones como la organización del servicio de barrido manual motorizado, del servicio de limpieza con agua a presión, el baldeo mecánico de aceras, de calzadas o los recursos humanos para la ejecución de los servicios, según figura el pliego de condiciones de 29 páginas analizado por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA.

Ese amplio listado de criterios contempla otra serie de cuestiones novedosas como los 4 puntos en los que se valora la colocación de un sistema de sujeción de contenedores para evitar el vuelco por el viento y su invasión en la vía pública o los 8 que se asignan a la realización de determinadas “campañas de comunicación y sensibilización para lograr un mayor calado en la sociedad y un mayor número de adhesiones”, detalla el documento.

En consonancia con los nuevos tiempos en los que se avanza hacia la menor dependencia de los combustibles fósiles y apuesta por las energías renovables, uno de los aspectos que se va a tener en cuenta es la adquisición de vehículos eléctricos asociados a los servicios de limpieza y servicios de repaso de contenedores. Hasta un máximo de 9 puntos se puede llevar cualquiera de los licitadores que apueste por la “adquisición y utilización de bicicletas eléctricas, porters, vehículos de cajas abiertas, hidrolimpiadoras o barredoras”. Las propuestas se valorarán en función del “número de vehículos de combustión que sustituyan, las posibles ventajas de su uso respecto a los vehículos actuales y las características técnicas de los mismos”, especifica el pliego.

Otro de los aspectos en los que es innovado el patrón del actual concurso radica en la decidida apuesta del gabinete Urtaran de potenciar el reciclaje. De esta manera se piensa favorecer en el pago del impuesto de basuras a los ciudadanos que hagan un mayor uso de los contenedores de basura, papel o cartón. Así se ha insertado un criterio, valorado con un máximo de nueve puntos, para quien apueste por dotar a los recipientes de una cerradura electrónica y un sistema de identificación del usuario. Será un factor diferencial en este capítulo el modelo de cerradura y sistema de identificación propuesto, “la seguridad, robustez y fiabilidad de la misma, la necesidad o no de accionamiento de botones y la tecnología utilizada para la transmisión y descarga de los datos desde la cerradura al sistema de control local u online”, apostilla el documento de 29 páginas revisado por DNA.

De no volver a detectar los técnicos municipales incumplimientos por parte de las firmas en cualquiera de las condiciones marcadas en el pliego, las previsiones del gabinete Urtaran esperan que para final de año se pueda llevar a cabo la adjudicación y comenzar 2021 con una nueva adjudicataria del servicio hasta el año 2025 y la posibilidad de alargarlo uno más. Se pondrá de esta forma fin a una tortuosa relación con la actual contrata que ejecuta la limpieza de la ciudad, FCC-GMSM, que ha llevado a vivir momentos de tensión y colocar a la ciudad al borde de una huelga en el servicio. El proceso se viene dilatando desde hace dos años cuando el Ayuntamiento de Gasteiz empezó a dar los primeros pasos encaminados a la rescisión del contrato. Tras llegar a un acuerdo amistoso para su salida, sin que supusiera un coste adicional a las arcas municipales, se dio paso a una primera licitación, abortado por los servicios técnicos municipales y que ha derivado en la segunda intentona ahora en desarrollo y que comenzó el pasado julio.

Segunda licitación. El concurso de adjudicación se ha tenido que volver a repetir después de que en noviembre pasado los técnicos municipales decidieran declararlo desierto al detectar varios incumplimientos respecto a las condiciones exigidas en el pliego.

Impugnación. El actual proceso no se ha visto exento de sobresaltos. La firma Sogesel planteó la impugnación de los pliegos de condiciones a través de un recurso interpuesto en el mes de julio. El 4 de agosto desistió de ese proceso y el OARC dio por finalizada su intervención en el asunto.

Apertura de plicas. El máximo órgano de contratación municipal procedió en la jornada de ayer a abrir las plicas de las tres empresas que toman parte en el concurso. La impugnación planteada por Sogesel supuso que por cuestiones de “seguridad jurídica” no se procediera a abrir los sobres en la sesión del pasado 4 de agosto.

Unión temporal de empresas. La fórmula de la UTE es de nuevo la elegida por las diferentes firmas que optan a llevarse el concurso. Repiten, como en la anterior ocasión, Cespa-Onaindia y Enviser-Urbaser. También toma parte FCC, actual prestataria, y se hace acompañar de la alavesa Balgorza.

107,4

Millones de euros. Cantidad global de dinero por la que sale a concurso la prestación del servicio durante los cuatro años de vigencia del contrato de limpieza.