- La técnica de educación para la transformación social de Medicus Mundi, Itsaso Sánchez, se subió a su bici al poco de acabar ayer la rueda de prensa en la que participó para anunciar el convenio del Ayuntamiento de Vitoria de 70.000 euros al fomento del comercio justo y responsable. Lo hizo para poner rumbo a la tienda de comercio justo de Medicus Mundi, en Pío XII, Dendamundi, donde suele echar una mano.

¿Cree que la gente se ha concienciado más sobre la compra de productos de comercio más justo, locales y sostenibles, a raíz de la pandemia?

-Sí, yo creo que esta crisis ha puesto sobre la mesa que este sistema actual no es sostenible y que es importante el comercio local y defender los derechos de los que los producen y consumen.

¿Diría que Álava es un territorio concienciado al respecto?

-Todavía falta mucho. En la provincia hay muchas iniciativas y organizaciones que trabajan por ello y cada vez hay más opciones, pero todavía falta.

¿Qué es eso que falta por hacer?

-Al final no todas las personas somos conscientes de que los productos o los servicios que consumimos tienen un impacto en la vida de las personas y en el medio ambiente. Falta ese cambio de chip, pero es importante que desde las instituciones se siga apoyando para poder ir cambiando entre todos.

¿Qué tipo de productos de comercio justo son los que tienen menor demanda?

-La panela, el chocolate y el café son los más conocidos, pero realmente hay de todo: desde artesanía producida por cooperativas de mujeres de India, cosmética natural a todo tipo de textil, y eso es lo que la gente no suele conocer.

En Vitoria cada vez hay más productos de ese tipo en las baldas, pero, ¿qué hay de los pueblos?

-Cada vez hay más. Todos los años, por el día mundial del comercio justo, nos trasladamos a Araia y también a Llodio, donde está Ipar-Hegoalde Taldea. En Ozaeta está el economato, que nos hace pedidos y en Agurain también ha surgido un economato hace tres o cuatro meses para comercio justo.

¿En qué consistirán esos recorridos por barrios en los que podremos participar en septiembre?

-Estarán abiertos a toda la ciudadanía, para todos los que tengan dudas sobre esta alternativa de consumo. Haremos el recorrido con el mapa que hay en la app de comercio justo de Vitoria, que, por suerte, está abierto a nuevos establecimientos que quieran adherirse.

Otra línea de trabajo es el consumo responsable de cuidados. Hace años que Medicus Mundi empezó a trabajar en esta línea y este año va a hacer una investigación en torno a la situación en origen de las mujeres que cuidan y que han migrado a Vitoria para realizar estos trabajos...

-Se hizo un diagnóstico, ¿Quiénes y cómo cuidan en Vitoria-Gasteiz?, y esta nueva investigación cierra el ciclo de la cadena de cuidado. Esta guía va a presentar historias de conexión entre los lugares de origen de algunas de estas mujeres y también se va a conocer sus procesos migratorios, sus historias de vida y sus condiciones sociales y laborales, como las que vimos durante el confinamiento, cuando no tenían derecho a ERTE, y siempre relacionándolo con el consumo en Vitoria de los cuidados.