a responsabilidad social corporativa tiene rasgos solidarios difíciles de obviar. Cuando las cosas llegan mal dadas, como es el caso, con el derrumbe casi general de gran parte de los mercados a nivel internacional, confiar en clientes, proveedores y socios parece la única opción de salir adelante y de garantizarse un camino hacia la subsistencia. Bajo esos preceptos, la cooperativa de Lapuebla de Labarca Covila ha establecido un programa de actuaciones tras el evidente descenso de la facturación por la disminución de la actividad comercial a la que se suman las notificaciones de impagos que les han comunicado varios clientes.

Según anuncian en su web, es prioritario para Bodegas Covila tratar de respetar al máximo "los pagos comprometidos con nuestros proveedores". Es su manera de contribuir a que la actividad económica se mantenga sin que los problemas financieros se trasladen a toda la cadena de creación de valor de este sector. Esta incluye a agricultores, socios, proveedores (cajas, etiquetas, servicios), otras bodegas y por supuesto trabajadores de Covila.

Para salir adelante, han negociado, con éxito, varias medidas financieras con las entidades bancarias con las que trabajan y están pendientes de otras adicionales. "Pensamos que con estas decisiones podremos compensar la falta de facturación y los retrasos en los pagos, o en su caso los impagos que se den", añaden.

Pare ello se anuncia que es preferible evitar costes financieros innecesarios, "así que os solicitamos que no pidáis anticipar los recibos que no hayáis emitido, para así tener todos un poco más de margen hasta ver cómo evoluciona todo esto. Nosotros vamos a hacer lo propio con nuestros clientes, si bien, en caso de que no se expresen en sentido contrario, procederemos a gestionar el cobro de las facturas a su fecha de vencimiento".

Por último, se dirigen a todos sus clientes y al sector de la distribución y la hostelería en general para transmitirles que "entendemos perfectamente vuestra situación, sin poder desempeñar vuestra actividad y por lo tanto con los ingresos paralizados. A todo ello hay que sumar la incertidumbre sobre lo que nos va a deparar el futuro".

Por ello proponen colaborar, "porque pensamos que es la mejor receta para salir juntos de esto". De esta manera anuncian que "vamos a tratar de prorrogar los vencimientos que nos solicitéis. Nosotros a cambio os pedimos que actuéis con responsabilidad y que no toméis decisiones unilaterales. Bodegas Covila trabaja asegurando el 100% de la facturación que realizamos a nuestros clientes y si se dan situaciones de impagos tenemos que dar parte al seguro. Por eso, pensamos que lo mejor es que nos llaméis, hablemos, evaluemos todas las variables y juntos tomemos la mejor decisión para las partes".

El mensaje concluye pidiendo a clientes y suministradores "os cuidéis. Dentro de poco podremos volver a la calle y nosotros veremos orgullosos como volvéis a servir nuestros vinos en vuestros bares, restaurantes, hoteles y demás establecimientos".

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Son los que jalonan la existencia de esta cooperativa de Lapuebla de Labarca, en pleno corazón de Rioja Alavesa.

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Son las que empujaron el nacimiento de esta cooperativa en un primer momento. Desde ese instante, la firma no ha parado de crecer.

Reactivado el concurso. Tras el parón impuesto por las restricciones del estado de alarma contra la pandemia, el Ayuntamiento de Laguardia ha reactivado el II Concurso de vinos institucionales con el objetivo de buscar y seleccionar un vino tinto y uno blanco que se convertirán en las marcas representativas de esta institución hasta mayo de 2021. Fecha en la que está prevista la celebración del tercer concurso para los próximos 12 meses. Los vinos ganadores se servirán por tanto en todos los actos municipales y servirán de obsequio para los compromisos municipales. Este concurso está abierto a todas las bodegas de Laguardia amparadas dentro de la Denominación de Origen Calificada Rioja y entre las que participen se elegirán dos vinos institucionales en las categorías de vino tinto joven y vino blanco joven. Las bodegas no estarán obligadas a presentarse a las dos categorías, pudiendo elegir en cual quieren competir.