Vitoria - La firma gasteiztarra BTI Biotechnology Institute alcanzará este próximo mes de julio su 20 aniversario. Y lo hará, además, con un buen motivo para celebrarlo. La empresa pilotada por el doctor en medicina, odontólogo e investigador Eduardo Anitua se ha situado un año más a la cabeza del ranking de producción científica a nivel estatal, con nada menos que 26 publicaciones en revistas científicas de impacto durante el pasado 2018, según anunció ayer la asociación española de bioempresas (Asebio) a través de su informe anual. El liderazgo de la biotecnológica vitoriana en este campo se extiende ya durante cuatro años consecutivos, tras encabezar también este listado en los anteriores ejercicios 2015, 2016 y 2017.

“Lo más importante es que esto demuestra que vamos por el buen camino, que tenemos una base científica sólida, un equipo multidisciplinar del que me siento más que satisfecho y que estamos trabajando muy bien”, apunta el fundador y director científico de BTI en declaraciones a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA. Se trata, a juicio de Anitua, de “un gran estímulo” para que la compañía continúe trabajando en el ámbito de la I+D y desarrollando también “nuevos avances” en sus dos grandes campos de especialidad, la biomedicina y la biotecnología. La medicina regenerativa y la implantología oral siguen siendo las actividades principales de trabajo en el día a día de BTI, aunque ni mucho menos son las únicas.

La sede central de la empresa y sus instalaciones se encuentran en Vitoria, muy cerca de las campas de Armentia, aunque BTI cuenta ya con filiales en Estados Unidos, Canadá, México, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Portugal, así como presencia en más de 30 países. El intenso trabajo de I+D desarrollado a lo largo de los años ha convertido a la compañía en un proveedor líder a nivel mundial de implantes dentales y la empresa es considerada además un referente internacional en el ya citado ámbito de la medicina regenerativa. El desarrollo del plasma rico en factores de crecimiento y su aplicación en múltiples especialidades médicas como la traumatología, la dermatología, la reumatología, la medicina estética, la medicina oral y la deportivo o, más recientemente, la oftalmología constituye una buena prueba de ello. Además, BTI ha impulsado con un éxito más cercano otra área de trabajo centrada en la apnea del sueño y la roncopatía, mediante el desarrollo de un innovador sistema automático de diagnóstico junto con otro de tratamiento de estas patologías.

sin descanso Los halagos no hacen caer en la relajación ni en la autocomplacencia a la plantilla de BTI, formada a día de hoy por más de 350 profesionales, que según Anitua son los verdaderos responsables de estos éxitos. “Esto es el reconocimiento a un equipo, porque es imposible tener semejante producción si no fuera por él”, recuerda el doctor, quien avanza que este año la compañía lleva también “un muy buen ritmo” en lo que a la producción científica se refiere. “Tenemos ya en marcha cinco ensayos clínicos e iremos viendo nuevas cosas cuando salgan los resultados. Seguimos trabajando también en el ámbito de la apnea del sueño y en el de la implantología oral, con nuevos diseños y técnicas para resolver casos severos de atrofias, por ejemplo, y también en el campo del dolor crónico. En definitiva, líneas en las que nos estamos consolidando muy bien”, apunta el investigador vitoriano. En lo que va de año 2019, el número de publicaciones indexadas por BTI ronda ya la treintena. “Yo no le llamo trabajo, sino actividad intensa. Y la sensación de que estamos haciendo lo que debemos hacer”, apunta de nuevo Anitua.

Uno de los principales valores de la compañía gasteiztarra es que, desde su fundación, reinvierte el 100% de sus beneficios en la I+D para generar más conocimiento científico y, a la larga, desarrollar herramientas terapéuticas que contribuyan a mejorar la calidad de vida de los pacientes. A día de hoy, BTI cuenta en sus filas con un total de 55 investigadores entre biólogos, médicos, ingenieros o bioquímicos. Sin dejar las cifras, BTI tiene ya 48 familias de patentes internacionales y 193 marcas registradas en 50 países, gracias en buena medida a una inversión en I+D de 55 millones de euros durante los últimos diez años.

Al margen de la actividad investigadora, el día a día de BTI sigue marcado por la práctica clínica, por el intercambio de conocimientos con agentes de medio mundo y también por la formación, ya que por el Instituto Eduardo Anitua ubicado en la misma sede de Armentia van a pasar sólo durante esta semana un total de 70 personas a participar en varios cursos. Algo más habrá que esperar para la conmemoración del 20 cumpleaños de la compañía, cuyos actos principales se celebrarán en noviembre, a caballo entre Vitoria y Madrid, en el marco de las jornadas científicas BTI Day. Una cita para la que Anitua promete “sorpresas”.

Consolidación. BTI Biotechnology Institute alcanzará este próximo mes de julio su 20 aniversario con un buen motivo para celebrarlo. La empresa pilotada por Eduardo Anitua se ha situado por cuarto año consecutivo a la cabeza del ranking de producción científica a nivel estatal, con 26 publicaciones en revistas científicas de impacto durante el pasado 2018, según anunció ayer la asociación española de bioempresas (Asebio) a través de su informe anual.

Estímulo. Se trata, a juicio de Anitua, de “un gran estímulo” para que la compañía continúe trabajando en el ámbito de la I+D y desarrollando también “nuevos avances” en sus dos grandes campos de especialidad, la biomedicina y la biotecnología. La medicina regenerativa y la implantología oral siguen siendo las actividades principales de trabajo en el día a día de BTI, aunque ni mucho menos son las únicas.

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Millones de euros ha invertido BTI en I+D en los últimos diez años.