oion - El trujal cooperativo de Oion ha iniciado la cuenta atrás para el cierre definitivo de sus instalaciones, ya que su continuidad precisaba de importantes inversiones en mejoras sanitarias y de maquinaria, y de gente joven que le diera el impulso necesario para que recuperara su rentabilidad. La decisión se tomó formalmente el domingo por la mañana en el transcurso de una asamblea general de la cooperativa, donde se hizo evidente la falta de apoyos a esta tradicional instalación oionesa, ya que de los 300 socios apenas acudieron una quincena de ellos.
El presidente del trujal cooperativo de Oion San Vicente, Félix Ruiz-Carrillo, expuso a los asistentes las tres posibilidades que tenía el trujal. Una sería deshacer la cooperativa del trujal y pasar sus instalaciones al resto de la cooperativa dedicada a temas vinícolas. Una segunda alternativa sería una fusión con Comy dejando desaparecer el trujal. Y la tercera, volver a retrasar la decisión hasta la constitución de una nueva Junta Directiva.
Había también una alternativa más: la existencia de un grupo interesado en reflotar el trujal, que inició hace unos meses conversaciones con el presidente de San Vicente, pero que finalmente no comparecieron el domingo, con lo que esa posibilidad queda descartada, al menos de momento.
Félix Ruiz-Carrillo explicó a los cooperativistas asistentes que la actividad del trujal había ido descendiendo de manera muy drástica y que la maquinaria se había ido quedando anticuada. Con los 40.000 kilos que entraban en las últimas campañas, no solo con olivas de Oion, sino también de Ribafrecha o Ventas Blancas, de La Rioja entre otras localidades, las molturaciones no se podían hacer demasiado seguidas y al realizarlas aumentaba el grado de acidez del aceite, lo que había disparado las alertas de Sanidad.
Tras las correspondientes inspecciones se había dictaminado que el trujal debía realizar obras y un cambio de maquinaria, pero con los recursos de la cooperativa no era suficiente y por lo tanto era imposible realizarlo sin endeudar a los socios. Por lo tanto, la decisión adoptada por los asistentes a la asamblea, celebrada en segunda convocatoria a la una de la tarde para dar tiempo a la llegada de más socios, fue la de comunicar a la cooperativa vinícola Comy la cesión de toda la instalación. Tras esa comunicación, Comy debe celebrar una asamblea para aceptar o no. Y si se acepta, se debe comunicar a la Asociación de Cooperativas de Euskadi para que también dé su aprobación. El destino final del solar y el edificio será, previsiblemente, para ampliar la bodega de la cooperativa.
Manuel González, cronista de Oion, ha dejado constancia de la historia del trujal. La constitución de la cooperativa San Vicente data de 13 de mayo de 1951. En un principio se denominó Cooperativa Agro Vinícola Oleícola Comy (Cooperativa Oyón, Moreda, Yécora), según reza en un cuadro que está situado en la sala de juntas de la misma. Estos cooperativistas eran dueños del terreno donde se construyó el trujal y cooperativistas del mismo. Con el paso de los años unos se marcharon y otros nuevos entraron, perdiendo la base fundamental de los acuerdos tomados en su fundación como Cooperativa Agro-Vinícola- Oleícola Comy.
La instalación del trujal cooperativo San Vicente fue inaugurado en el año 1953 a la salida de la villa, orilla izquierda de la carretera Oion-Bernedo-Vitoria, junto a la bodega cooperativa Comy, donde continúa. La maquinaria del trujal es de la firma Marrodán y Rezola, continuadora de la casa que fundó don Emigdio Marrodán en 1851 en La Rioja. La prensa hidráulica utilizada en la instalación es de columnas de acero para grandes presiones o cabezales de viga de acero forrados de chapa, que somete a los capachos a una presión de un total de doscientas atmósferas.
Última oportunidad Hace unos años se intentó llegar a un acuerdo entre los olivicultores de Oion, Moreda, Lantziego y otras localidades para situar el trujal común en las instalaciones del de San Vicente, pero finalmente se acordó que era más adecuado el de la Equidad, de Moreda. Fue la última oportunidad de recibir un empujón hacia adelante, ya que eran los tiempos en los que se acudía a molturar a Oion no solo desde localidades de Rioja Alavesa, sino también de La Rioja y llegaban a entrar en máquinas hasta 200.000 kilos de olivas.
cooperativa. La constitución de la cooperativa San Vicente tuvo lugar el 13 de mayo del año 1951. En un principio se denominó Cooperativa Agro Vinícola Oleícola Comy (Cooperativa Oyón, Moreda, Yécora).
Socios. Son los que conforman la cooperativa que gestionaba el trujal San Vicente ubicado a las afueras de Oion.