Vitoria - El juicio por el presunto saqueo del grupo Urvasco arranca el lunes en la Audiencia Provincial de Álava y la Fiscalía pide penas de 13 años y 6 meses para cuatro de los cinco imputados, entre ellos el empresario alavés Antón Iraculis, y de 8 años y medio para su mujer. El juicio está previsto que se prolongue hasta el jueves y en el banquillo de los acusados además del matrimonio se sentarán las dos hijas y un socio de Iraculis.
La Fiscalía señala que en 2008 desviaron 34,7 millones del grupo, que llegó a ser el máximo accionista de Silken, a pesar de las circunstancias económicas que arrastraba, que entró en concurso de acreedores, para obtener un “beneficio patrimonial indebido en perjuicio para sus acreedores”. Imputa a cuatro de los acusados un delito societario de falsedad en cuenta social y dos de apropiación indebida.
A la quinta procesada, la mujer de Iraculis, sólo le acusa de dos delitos de apropiación indebida, y apunta que fue cooperadora necesaria. En el escrito se indica que todos ocupaban cargos directivos en Grupo Urvasco y Grupo Hotelero Urvasco y que, conscientes de que la situación era comprometida, idearon un plan para obtener un beneficio patrimonial indebido. - Efe
