Con la Virgen de la Cueva haciendo horas extraordinarias por la Cornisa Cantábrica y la primavera en paradero desconocido, el territorio alavés sufrió -y seguirá padeciendo hasta esta medianoche- las consecuencias de un intenso temporal que ha encendido todas las alarmas por precipitaciones e inundaciones. Las incesantes lluvias de las últimas horas unidas a la nieve caída en diferentes puntos de Álava la madrugada del martes al miércoles y al desembalse del pantano de Ullibarri sembraron de pequeños desbordamientos el itinerario del río Zadorra a su paso por el barrio vitoriano de Abetxuko y también provocaron inundaciones en numerosos puntos de la geografía alavesa, como Arraia-Maeztu. El viento intenso del noroeste también protagonizó la jornada y la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, informaba de que en Páganos se registraron rachas de hasta 96 kilómetros por hora. El Zadorra también abandonó su cauce y anegó las riberas a su paso por la localidad alavesa de Margarita. En este punto, hubo que cortar el tráfico en la carretera A-4302. Mientras, en las redes sociales se daba cuenta de que los ríos Errekaleor y Santo Tomás, pequeños afluentes del Zadorra, también se habían descontrolado a su paso por Arkaiate y Salburua. El río Alegría, perteneciente a la misma cuenca, alcanzaba el nivel amarillo y en las carreteras, el puerto de Azazeta amanecía blanco aunque con la calzada transitable. Herrera, en la red secundaria, se mantuvo cerrado puntualmente por la mañana y se recomendó circular con precaución en los altos de Bernedo, Vitoria, Kurtzeta, Opakua y Zaldiaran.

La Policía Local y los Bomberos de Vitoria también tuvieron ayer carga adicional de trabajo vigilando los cauces y las carreteras en las que se acumulan tradicionalmente balsas de agua. La Dirección General de Tráfico, DGT, alertaba de inundaciones “nivel negro” en Trespuentes, Tuyo y en diversas carreteras comarcales. Los responsables de los concejos y de las juntas administrativas se mantienen aún en contacto permanente con ambos cuerpos por si fuera necesario retirar ganado o vehículos de zonas afectadas.

A primera hora de la tarde de ayer, los avisos que el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco había activado el día anterior ante la presencia de lluvias persistentes -sobre todo en Gipuzkoa y Bizkaia-, cobraron importancia y el plan especial de emergencias entró en fase 1 de alerta ante la situación de las cuencas y la previsión meteorológica para las próximas horas.

más desembalse El pantano de Ullibarri, que siguiendo las órdenes de la Mesa Interinstitucional de Seguimiento del Sistema del Zadorra llevaba desde el 5 de enero liberando su contenido a un ritmo moderado -con picos de hasta 30 metros cúbicos por segundo-, incrementó por la tarde la cadencia de desembalse hasta alcanzar los 60 metros cúbicos por segundo, debido a las predicciones que llegaban desde Euskalmet. Pronósticos que apuntan a que las lluvias se intensificarán durante las próximas 24-36 horas. El citado organismo de seguimiento se reunió ayer en Vitoria bajo la presidencia del director general de la Agencia Vasca del Agua-URA, Ernesto Martínez de Cabredo, y del viceconsejero de Seguridad, Josu Zubiaga, para examinar los anuncios meteorológicos que vaticinan un aumento del nivel de los embalses del sistema del Zadorra en general y del de Ullibarri en particular.

El objetivo de la maniobra llevada a cabo en el pantano es poder retener el agua que vaya a entrar en el embalse a lo largo de las próximas horas, según informaron desde URA. Las previsiones de Euskalmet señalan que el pico máximo de precipitación tendrá lugar en torno a la medianoche de hoy, jueves. A partir de ese momento, se espera que las lluvias tiendan a remitir.

Lluvia. Las incesantes precipitaciones han elevado el caudal del Zadorra y provocado inundaciones a su paso. Abetxuko y Margarita fueron dos de los puntos más afectados ayer por los desbordamientos.

Nieve. La nieve caída durante la noche del martes obligó a cerrar durante unas horas el puerto de Herrera. En los altos de Azazeta, Bernedo, Vitoria, Kurtzeta, Opakua y Zaldiaran, se recomendó circular con precaución.

Viento. El viento intenso del noroeste también protagonizó la jornada de ayer y Euskalmet informó de que en Páganos se registraron rachas de hasta 96 kilómetros por hora.

Desembalse. En el pantano de Ullibarri, donde se mantenía un desembalse constante desde enero, hubo que incrementar el ritmo a 60 metros cúbicos por segundo para liberar espacio en el que dar cabida al agua que llegará durante las próximas horas.

Predicción. Las previsiones de Euskalmet indican que continuará lloviendo de forma más o menos ininterrumpida hasta esta medianoche. A partir de ese momento, se espera que las precipitaciones tiendan a remitir de forma progresiva.