vitoria - A la plaza Santa Bárbara le ha llegado el momento de someterse a un completo cambio de imagen. El lifting urbanístico, que irá acompañado de un marcado carácter de puesta al día comercial, dará comienzo el 25 de octubre -el próximo miércoles- con el vallado perimetral progresivo del foro y del tramo de la calle Postas que discurre tangencialmente por su flanco. El acceso al parking subterráneo de El Corte Inglés se mantendrá abierto y completamente operativo hasta el próximo marzo, pero el lavado de cara de la zona incluirá algunos cambios en el tráfico durante el plazo de ejecución de las obras, estimado en 15 meses, por lo que los responsables municipales, Iñaki Prusilla y Nerea Melgosa, pidieron ayer a los vecinos y habituales de la zona “paciencia” mientras la plaza se actualiza. “El esfuerzo merecerá la pena”, prometieron.
Está previsto que las primeras máquinas entren en la plaza el día 27 para iniciar poco a poco los trabajos de derribo, que se prolongarán por espacio de 4 meses. Aunque los accesos a los portales y garajes (2) de la calle Postas que dan a Santa Bárbara podrán seguir usándose por parte de los vecinos, el resto de los conductores ya no podrá circular por este tramo de la vía a partir del miércoles de la semana que viene. El acceso a la zona -únicamente para carga y descarga, residentes y usuarios del aparcamiento subterráneo- se reducirá a la entrada por la calle Jesús Guridi, de manera que se crearía un pequeño circuito que desembocaría de nuevo en la calle La Paz. Con el fin de evitar congestiones de tráfico en este punto, se suprimirá uno de los actuales semáforos de Paz y se instalará uno nuevo desde Postas para regular el paso de vehículos.
El proyecto de modernización de la plaza, tal y como indicó el titular municipal de Espacio Público, delimitará tres espacios verdes diferenciados. Uno, el más cercano a El Corte Inglés, dedicado a las especies vegetales de ámbito mediterráneo, otro, enfrentado al primero, de carácter atlántico y un tercero reservado a los juegos infantiles, mucho mayor que el que existe actualmente. Tal y como puntualizó Prusilla, el recinto mediterráneo dispondrá de un largo banco corrido, de manera que se incrementarán los lugares destinados al descanso, y de un estanque en forma de L. Aprovechando el cambio de imagen, se renovarán todas las aceras del entorno, se habilitarán cuatro accesos peatonales al parking y se llevará a cabo una pequeña intervención en la cercana plaza de Jesús María de Leizaola. “El acceso a la Plaza de Abastos será mucho más amable y cabrá la posibilidad de instalar veladores para la hostelería. Se ganará un espacio para el disfrute de las personas, porque actualmente la plaza es un lugar de paso más que un lugar en el que permanecer”, señaló el concejal.
Una de los puntos que más expectación han despertado es el de la futura pérgola. Emplazada longitudinalmente en el frente que da a Postas, albergará 48 puestos del mercado de productores que se celebra todos los jueves y sábados en este lugar. La cubierta les permitirá resguardarse de las inclemencias del tiempo y disponer de un área mucho más ordenada y visualmente atractiva.
puestos del mercado Desde que el Ayuntamiento tuvo claro que Santa Bárbara necesitaba cambiar de aspecto, los responsables municipales iniciaron los contactos con los productores que dos veces por semana instalan sus puestos en este céntrico enclave de Vitoria para consensuar el diseño del proyecto de reforma. “Vamos a eliminar las barreras arquitectónicas, lo cual es positivo para que puedan vender mejor sus productos”, explicó la concejala de Empleo y Desarrollo Económico Sostenible, Nerea Melgosa.
Mientras se desarrollen los trabajos, el mercado se trasladará unos metros hasta recalar en la vecina plaza de Jesús María de Leizaola a partir del próximo 2 de noviembre. “No lo haremos antes porque, después de hablar con los vendedores, nos lo han solicitado así. Ellos están informando a sus clientes del cambio de ubicación y el Ayuntamiento también va a realizar una campaña de difusión a través de, entre otros elementos, banners municipales”, explicó la edil.
Aunque el planteamiento inicial de la pérgola estuvo acompañado de cierta polémica, Melgosa señaló que actualmente tanto los vecinos como los comerciantes están satisfechos con una instalación que “acogerá actividades de ciudad y de regeneración económica de la zona”. 32 de los puestos ya están ocupados y sus titulares han pactado las condiciones de uso con el Ayuntamiento. Podrán realizar provisionalmente las labores de carga y descarga en el aparcamiento del Iradier Arena y confían en que las mejoras incentiven el consumo en el mercado.
Los portales de la zona ya lucen los habituales carteles informativos municipales y la programación de los trabajos se llevará a cabo de manera que afecte lo menos posible al día a día de vecinos y comerciantes. Tal y como precisó Prusilla, el aparcamiento subterráneo únicamente se verá obligado a detener su actividad durante un mes a partir del próximo marzo.
control frente a desmanes Mientras el Ayuntamiento se prepara para la llegada de las máquinas, el grupo municipal de Podemos solicitó ayer mismo al equipo de gobierno “que esté muy encima” de la reforma para que no se repitan los problemas ya vividos anteriormente con otros contratos temerarios. Recordaron que el proyecto fue adjudicado a la UTE Ferrovial-Onaindia por un coste un 30% inferior al precio de licitación, baja que la unión de empresas logró justificar comprimiendo sus beneficios industriales a sólo el 1,5%. “Cuando se priman los criterios cuantitativos hasta límites tan extremos nos solemos encontrar condiciones laborales indignantes, obras que se retrasan sine díe o trabajos mal rematados. En esta ciudad tenemos unas cuantas malas experiencias así y parece que ningún gobierno quiere aprender”, denunció el portavoz de la formación morada, Jorge Hinojal.
Entre los casos recientes más sangrantes de obras muy abaratadas que acabaron en denuncias por precariedad laboral y retrasos están la reforma de la cubierta del centro de noche Aterpe, la construcción del centro cívico de Salburua y el proyecto de transformación de la Avenida de Gasteiz. En el caso de los trabajos de renovación de las tuberías de San Martín, la empresa ganadora, con una oferta un 40% por debajo del precio de licitación, se declaró en concurso de acreedores y abandonó el barrio cuajado de zanjas. “El Ayuntamiento, como institución pública y administración más cercana a la ciudadanía, tiene una responsabilidad con la gestión de sus arcas, que se nutren del dinero de las personas que viven en esta ciudad, y con todas las personas que trabajan en sus contratas”, recordó el edil de Podemos.
Además, advirtió de que el sistema de “pujas feroces” alimentado por la crisis deja fuera a muchas pequeñas empresas del territorio y frena su crecimiento, fortaleciendo a las grandes compañías. Por ello, además de controlar esta última obra al detalle, el edil de Podemos solicitó al gobierno que ponga fin al baile de subastas aplicando un modelo que prime el bien común. “Es cuestión de voluntad política”, concluyó.
Tres espacios. El proyecto delimitará tres espacios verdes diferenciados. El primero, junto a ‘El Corte Inglés’, se dedicará a las especies vegetales mediterráneas. El segundo, enfrentado al primero, tendrá carácter atlántico y el tercero, que estará reservado a los juegos infantiles, será mucho mayor que el que existe actualmente.
Mercado. En cuanto al mercado de productores locales de los jueves y los sábados, se trasladará de forma provisional, a partir del 2 de noviembre, a la vecina plaza Leizaola. Cuando acabe la reforma, contará con 48 puestos protegidos por una pérgola.
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Los responsables del Ayuntamiento de Vitoria calculan que las obras concluirán en 15 meses y ha pedido “paciencia” a los vecinos ya que, aseguran, “el resultado merecerá la pena.
