vitoria - La Diputación Foral de Álava se personará en el caso de prostitución de menores que investiga un juzgado de Vitoria, pero sólo podrá ejercer la acusación particular con cuatro de los ocho jóvenes del centro de Sansoheta de los que tiene la tutela legal, ya que de los otro cuatro la mantienen sus padres.

De este modo, en un auto dictado esta semana por el Juzgado de Instrucción número 2 de la capital alavesa, el juez estima parcialmente el recurso que presentó la institución foral, después de que el Juzgado denegara su personación a través del Consejo del Menor. Dado que la Diputación alavesa sólo tiene la “guarda” de estos otros cuatro menores, el auto explica que se hará un ofrecimiento a sus progenitores, pues conservan la patria potestad sobre sus hijos, por si desean emprender acciones legales y personarse en esta causa, indican fuentes de la institución foral.

En esta investigación judicial ya están personadas también como acusación la Fiscalía de Menores y la Asociación Clara Campoamor, especializada en la defensa de los derechos de menores y mujeres maltratadas. El caso se enmarca en una presunta trama de prostitución de menores en la que hay al menos seis imputados, entre ellos un psicólogo que estuvo internado un mes y medio en prisión preventiva y otras cinco personas, todas ellas actualmente en libertad provisional con la obligación de acudir cada quince días al juzgado. La Policía vasca comenzó sus pesquisas el pasado 6 de octubre tras la denuncia del director de Sansoheta, que contó a la Ertzaintza que en una tutoría una menor reveló que desde hacía algún tiempo ejercía la prostitución fuera del centro.

Al tomarle declaración, esta chica relató que la habían llevado a un piso para practicar sexo con un hombre a cambio de dinero e implicó a, al menos, un monitor del centro que fue apartado de su trabajo. Posteriormente la Ertzaintza detuvo a un psicólogo, que ocasionalmente trabajó con la Diputación Foral de Álava en valoración de adopciones, quien ingresó en prisión pero luego quedó en libertad provisional. El caso, en el que las víctimas son menores de entre 14 y 17 años, se mantiene por el momento bajo secreto de sumario. - Efe