samaniego - Hace ya varios años, desde 2012, que Bodegas Ostatu se comprometió a trabajar con un fuerte compromiso con la viticultura integrada, sostenible y ecológica, así como el cuidado del medio ambiente mediante la reducción de sus emisiones de CO2 habiéndose convertido en la única bodega en tener todos sus vinos amparados bajo el Certificado de la huella de Carbono. En esta ocasión, dan un paso más al unirse como socio a Goiener, una cooperativa sin ánimo de lucro que reúne a miles de personas con el deseo de cambiar el modelo energético actual y trabajar para alcanzar un modelo 100% renovable y desarrollar así una economía sostenible. Según Gonzalo Sáenz de Samaniego, gerente de la bodega, esta incorporación supone “implicarnos directamente en una iniciativa alternativa y libre, que quiere marcar una tendencia en el mercado energético para las grandes compañías y que además está participando de forma total con números pequeños agentes y empresas de nuestro territorio. Todo ello nos proporciona un ligero ahorro económico y un desarrollo territorial propio”.
Aunque muchos productores vitivinícolas mantienen respetuosas formas de trabajo, el uso de maquinaria y carburantes, los abonos, el transporte, la propia fermentación o el embotellado y embalaje emiten una serie de gases a la atmósfera, los denominados gases de efecto invernadero, que contribuyen con los factores desencadenantes del cambio climático. Consciente de ello, la familia Sáenz de Samaniego Berganzo decidió someter toda su actividad a un estudio de cálculo de huella de carbono, comprometiéndose, a su vez, a reducir y compensar sus emisiones de CO2 acogiéndose a proyectos avalados por la ONU. Bodegas Ostatu lleva impulsando desde 2012 cambios en su producción y gestión para reducir el impacto medioambiental. Dentro de estas medidas se encuentran ajustes en el diseño, sustitución del gasoil por biomasa o la utilización de botellas de menor peso, así cómo seguir incidiendo en una viticultura orientada a preservar y respetar el medio natural. - P.J.P.
