vitoria - Los grupos junteros de EH Bildu y el Partido Popular dieron ayer el primer paso en la búsqueda de acuerdos para sus modificaciones de la norma foral, que permitirían mitigar la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). El diputado general, Ramiro González, descartaba la posibilidad de acometer esa reforma ante la falta de consenso en las Juntas, como, según apuntó, le habían trasladado los representantes de los tres principales grupos de la oposición, pero ayer tanto PP como EH Bildu aseguraron que sí están dispuestos a consensuar esos cambios con el gobierno foral. Ambos, eso sí, con sus respectivas y contrapuestas ideas.
El diputado general se comprometió en abril a estudiar la posibilidad de un cambio en dicha norma, tras la petición de un Ayuntamiento de Vitoria que necesita esa alteración para que el recargo del 28% a las VPO pueda limitarse, ya desde este curso, con los recibos girados, hasta un máximo del 10%. El PP registró ayer su propuesta, pero con una modificación que no tendría como tal carácter retroactivo, por lo que las 20.000 viviendas de VPO afectadas por el aumento del 28% en el IBI de este año no podrían beneficiarse. “Para eso ya no estaríamos hablando de una modificación normativa, sino de una bonificación, porque ya se ha cobrado y ese asunto es muy complicado; requiere de ingeniería para resolverlo. Debe ser el gobierno quien presente su propia iniciativa al respecto”, apuntó Javier de Andrés.
El documento del PP contiene una única alteración respecto a la norma actual: la eliminación de una frase. El artículo 14 establece en su segundo punto que “los ayuntamientos podrán reducir el tipo de gravamen hasta el 0,15% tanto cuando se trate de bienes de naturaleza urbana como de naturaleza rústica”, pero el PP elimina la sentencia que le sigue, que argumenta que eso se producirá “siempre y cuando no suponga, respecto de los bienes de igual uso, una disminución de la recaudación por este impuesto respecto de la obtenida en el periodo impositivo anterior”. “Esa frase no aporta nada y su eliminación servirá para evitar una interpretación perjudicial para los vecinos de Vitoria. Quitándola podrán seguir pagando lo que les corresponde, que va a ser menos, en la medida en que sus inmuebles valdrán menos”, explicó De Andrés en referencia tanto a los poseedores de una VPO como de vivienda libre, por la futura revisión de los valores catastrales.
no se pueden debatir las dos El portavoz del PP cargó contra el documento de EH Bildu -registrado el jueves-, al que calificó como “conflictiva” y “una chapuza”, pero ahora serán las Juntas las que decidan cuál de las dos propuestas registradas se debate y cuál queda fuera, pues según la reglamentación actual la Cámara foral no permite que ambas se debatan de forma simultánea, teniendo preferencia la primera en ser registrada. Sea como fuere, el debate no se producirá antes de septiembre.
Luis María Salgado, de EH Bildu, trasladó ayer los dos puntos principales de su texto: “gravar la especulación injusta que supone mantener viviendas vacías mientras se desahucia a familias y facilitar a los ayuntamientos que puedan ser más efectivos a la hora de conceder bonificaciones a las personas en función de su renta, para que el IBI no se convierta en un problema para quienes peor lo están pasando”. EH Bildu propone “gravar las viviendas que se mantengan vacías con un recargo que podría llegar al 150% de la cuota íntegra del impuesto”, algo que ya contemplan en las normas forales de Bizkaia y Gipuzkoa, por lo que Álava “ha quedado desarmonizada, que es el argumento que el PNV esgrime en infinidad de ocasiones ante otras modificaciones fiscales planteadas por EH Bildu”.